El presidente del Gobierno ha insistido este jueves en que Manuel Zelaya debe ser restituido como presidente de Honduras aunque "haya podido cometer hechos que lleven a un enjuiciamiento político o en los tribunales".
En declaraciones a RNE, Zapatero ha hecho hincapié en diferenciar que la gestión de Zelaya no puede justificar el hecho de que fuera expulsado del país por los militares el pasado domingo, y ha recalcado que España mantiene una posición "firme" al respecto.
"Podemos discutir la gestión de Zelaya. Ha podido cometer hechos que lleven a un enjuiciamiento político o en los tribunales, pero es indiscutible que a un presidente no se le puede secuestrar por militares y sacarlo del país", ha argumentado.
Zapatero ha recordado que este principio no se quiebra en ningún país de Iberoamérica desde hace más de veinte años y ha subrayado que "hay que ser muy firmes, más allá de lo que pensábamos de Zelaya", en que debe ser restituido como presidente de Honduras.
El jefe del Ejecutivo ha dicho que la Organización de Estados Americanos tiene el apoyo de España "para esa tarea" y que la salida pasa por la restitución de la legalidad en Honduras y un gran consenso nacional ante el riesgo de que se produzca una "fractura social".
En ese sentido, ha recordado que la situación económica del país centroamericano es "muy lacerante" y ha asegurado que una inestabilidad política como la que vive ahora podría ahondar esa situación.