LD (EFE) Al menos veintiocho personas han muerto y otras 42 resultaron heridas después de que un terrorista suicida hiciera explotar un cinturón-bomba en el interior de un centro de reclutamiento policial en la provincia de Diyala, al noreste de Bagdad.
Según las fuentes, el suicida portaba un cinturón de explosivos que detonó cuando los aspirantes a policía se congregaban delante de este centro en Yalula, 80 kilómetros al noreste de Baquba, la capital de la provincia.
De acuerdo con varios testigos, el terrorista suicida condujo un coche hasta las proximidades de las instalaciones policiales, y después se dirigió a pie hasta un puesto de control junto al que se agolpaban decenas de reclutas.
El atentado, el más sangriento en esta provincia en las últimas semanas, es, según un analista político local, "un mensaje de Al-Qaeda destinado a recordar su presencia y su fortaleza, a pesar de la campaña militar contra ellos en las últimas semanas".