L D (EFE) Sin embargo, el mismo portavoz recalcó que, aunque la investigación del caso no se ha concluido, "no hay pruebas de que ninguno de los dos este implicado en la venta de información a esos tres países".
En su confesión de doce páginas, según este portavoz oficial, Khan también citaba como implicados en la filtración de la información nuclear a otro científico y un asesor de la ex primera ministra Benazir Bhuto.
El portavoz de las Fuerzas Armadas paquistaníes, el general Shaukat Sultan, declaró por su parte que Khan actúo "por su cuenta" y aseguró que, desde la llegada al poder del actual presidente, el general Pervez Musharraf, los secretos nucleares de Pakistán "están bien guardados". Sultán afirmó que, "desde la constitución de la Autoridad del mando Nacional (que encabeza Musharraf) en febrero del 2000, ese tipo de actividades no se han producido". Musharraf llegó al poder en 1999, tras derrocar al entonces primer ministro Nawaz Sharif en un golpe de estado incruento.
Por otro lado, tres miembros de la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) se encuentran en Pakistán para intercambiar información sobre la filtración de información en materia nuclear con el equipo de investigación paquistaní encargado de este caso, informaron a EFE fuentes de los servicios secretos. La investigación se inició cuando la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) informó a finales de noviembre pasado que "un par de científicos paquistaníes" habían facilitado "información y tecnología nuclear a Teherán", según las autoridades iraníes.
Khan se encuentra recluido en su domicilio de Islamabad, aunque no está detenido, y las autoridades todavía no han decidido si será procesado o no por filtrar información secreta a otros países, junto con al menos otros seis científicos y responsables de la seguridad del país. Los partidos políticos opositores paquistaníes, con los nacionalistas e integristas islámicos a la cabeza, han criticado al Gobierno por llevar a cabo esta investigación sobre Khan, al que consideran un "héroe nacional", como al resto de científicos nucleares, cuyo trabajo califican de "garantía para la seguridad del país".
Estos partidos, que tienen una amplia representación parlamentaria, han afirmado que, si se sanciona a estos científicos, se producirá un "levantamiento" contra el régimen de Musharraf, al que acusan de "plegarse a las presiones de EEUU" con esta investigación.
En su confesión de doce páginas, según este portavoz oficial, Khan también citaba como implicados en la filtración de la información nuclear a otro científico y un asesor de la ex primera ministra Benazir Bhuto.
El portavoz de las Fuerzas Armadas paquistaníes, el general Shaukat Sultan, declaró por su parte que Khan actúo "por su cuenta" y aseguró que, desde la llegada al poder del actual presidente, el general Pervez Musharraf, los secretos nucleares de Pakistán "están bien guardados". Sultán afirmó que, "desde la constitución de la Autoridad del mando Nacional (que encabeza Musharraf) en febrero del 2000, ese tipo de actividades no se han producido". Musharraf llegó al poder en 1999, tras derrocar al entonces primer ministro Nawaz Sharif en un golpe de estado incruento.
Por otro lado, tres miembros de la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) se encuentran en Pakistán para intercambiar información sobre la filtración de información en materia nuclear con el equipo de investigación paquistaní encargado de este caso, informaron a EFE fuentes de los servicios secretos. La investigación se inició cuando la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) informó a finales de noviembre pasado que "un par de científicos paquistaníes" habían facilitado "información y tecnología nuclear a Teherán", según las autoridades iraníes.
Khan se encuentra recluido en su domicilio de Islamabad, aunque no está detenido, y las autoridades todavía no han decidido si será procesado o no por filtrar información secreta a otros países, junto con al menos otros seis científicos y responsables de la seguridad del país. Los partidos políticos opositores paquistaníes, con los nacionalistas e integristas islámicos a la cabeza, han criticado al Gobierno por llevar a cabo esta investigación sobre Khan, al que consideran un "héroe nacional", como al resto de científicos nucleares, cuyo trabajo califican de "garantía para la seguridad del país".
Estos partidos, que tienen una amplia representación parlamentaria, han afirmado que, si se sanciona a estos científicos, se producirá un "levantamiento" contra el régimen de Musharraf, al que acusan de "plegarse a las presiones de EEUU" con esta investigación.