Uno de los líderes del peligroso cártel "La Familia" ofrece un "pacto" a Felipe Calderón

"Sepa (Calderón) que no somos sus enemigos, nosotros lo estimamos al señor, somos personas conscientes, sabemos que nuestro trabajo es mal visto por la sociedad pero (...) no me avergüenzo". "Nosotros queremos decirles y queremos que alguien nos escuche, que nos escuche el presidente de la república mexicana, el señor Felipe Calderón", dijo Gómez en una llamada telefónica a un canal de televisión del estado de Michoacán, donde opera el cártel del narcotráfico.

Servando "La Tuta" Gómez, uno de los líderes del cártel de "La Familia Michoacana" y por el que la fiscalía ofrece 30 millones de pesos (1,6 millones de euros) por información que lleve a su captura, manifestó su respeto por el Ejército y la Armada de México. "Esto nunca se va a acabar, queremos llegar a un consenso", dijo Gómez en declaraciones recogidas por el diario El Universal.

Gómez, a quien el Gobierno federal identifica como uno de los máximos mandos operativos de la organización, explicó que el pleito es "única y exclusivamente con la Policía Federal Preventiva y la SIEDO. ¿Por qué? Porque están atacando a nuestras familias (...) se están llevando gente inocente en todo el estado de Michoacán y están haciendo lo indebido", dijo. Además pidió a las autoridades que les entiendan, y que ellos, por su parte, actuarían con respeto con las autoridades que van detrás de ellos "porque es su trabajo, pero también que no molesten a nuestras familias", precisó.

El presunto líder del narcotráfico aseguró que "La Familia" "se deslindaba completamente" de "Los Zetas". "Antes éramos amigos, ahora somos enemigos, por todos los errores que cometían nos hicimos a un lado, y se lo repito, es un mal que está sucediendo en todo el mundo, no sólo en Michoagán", espetó.

"Proteger a los nuestros"

Durante la entrevista "La Tuta" explicó que crearon el cártel con el fin de "proteger a los nuestros". "La Familia la creamos para cuidar y salvaguardar los intereses de nuestro pueblo, no queremos que nadie les falte al respeto. Nosotros, a nuestra manera de entender no les faltamos al respeto a las personas. Si están los levantones, correctamente, pero no somos secuestradores, ni matamos por dinero", explicó. En consecuencia señaló que su objetivo son las personas que se niegan a pagar, aquellos que tienen familiares que trabajan para el gobierno federal, o los gobiernos estatales.

Asimismo, mandó un mensaje a la población de Michoagán, atemorizada ante la última oleada de asesinatos en el estado, y dijo que "La Familia" no tiene nada en contra de ningún ciudadano. "Atacamos a los que están apoyando a 'Los Zetas', de las personas que están arriando la cuerda como a un muchachito, un muchachito que estaba en nuestra compañía y se alió con 'Los Zetas', que son bandidos, y se fue para allá, y este muchachito ha convencido a mucha gente, la mayoría de ellos son drogadictos", manifestó.

"El gobierno no dialogará con el crimen"

Por su parte, el Gobierno mexicano rechazó todo tipo de diálogo o pacto con las bandas del narcotráfico, que han desatado una oleada de violencia que ha dejado más de 12.300 muertos desde diciembre de 2006, cuando Calderón puso en marcha operativos antidroga en varias regiones del país incrementando el número de policías y militares desplazados a las zonas más peligrosas.

"El Gobierno federal no dialoga, no pacta ni negociará jamás con organización delictiva alguna", dijo en un comunicado a la prensa el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, quien añadió que no cederán jamás al chantaje. "Las organizaciones criminales deben tener claro que la ofensiva del Estado va a continuar y que la violencia entre ellas sólo terminará cuando se sometan a la autoridad", agregó Gómez Mont. Así las cosas, un portavoz de la Procuraduría General de la República (PGR) dijo que todo parecía indicar que era la voz de Gómez la que se escuchó en la llamada telefónica.