LD (EFE) Una mezquita del noreste de Londres está bajo sospecha después de que se descubriera que algunos de los ocho terroristas que atentaron este mes en la red de transportes pasaron por ella. Según el diario británico The Times, la mezquita era un punto de encuentro para los terroristas que hicieron de ella un refugio para la difusión de un ideario radical.
Durante los últimos años, Mohammed Siddique Khan, el líder del grupo que causó los primeros atentados, visitó la mezquita en varias ocasiones al igual que varios integrantes de la célula norteafricana a la que se le atribuyeron los atentados del día 21. También se han vinculado con esa mezquita al llamado "terrorista de los zapatos", Richard Reid, que intentó poner una bomba en un avión de pasajeros con cerca de doscientas personas a bordo, y al francomarroquí Zacarias Moussaoui, único acusado por los atentados del 11-S en EEUU.
El lugar es conocido por los londinenses como la mezquita de "Finsbury Park", en el barrio de Highbury, cerca del estadio de fútbol del Arsenal. La mezquita ya fue lugar de reunión y encuentro en otras ocasiones desde su construcción en 1988, y es que en los años noventa se refugiaron en ella fugitivos argelinos que huían del conflicto civil en el país árabe. Sin embargo, según apunto The Times, en ella también se encontraban grupos de terroristas activos en Argelia conocidos como GIA o GSPC.
En la mezquita del parque de Finsbury se podían conseguir, según la investigación del diario, pasaportes robados o documentos falsos. Las comunidades que allí se reunían, se convirtieron en “una presa fácil de predicadores y militantes radicales” donde se ponía como ejemplo de una eficaz gestión el régimen talibán en Afganistán.