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Una joven del PCE explica en El País qué es ser comunista

En su particular conmemoración del derribo del Muro, El País incluye una entrevista a dos bandas con Willy Meyer y una joven militante de IU bajo el título "¿Qué es ser comunista en 2009?". Las respuestas: la URSS no era tan mala, Cuba es la verdadera democracia y Otegi, una víctima.

El diario de Prisa reúne en una entrevista a Willy Meyer, eurodiputado de IU y una militante de 26 años del PCE llamada Esther López Barceló, arqueóloga y técnica del área de Juventud en IU . Pretende juntar dos generaciones de comunistas, la vieja guardia y las nuevas generaciones. Pero, a tenor de las respuestas, parece que se han intercambiado los papeles. El eurodiputado, tras 40 años de militancia en el PCE, parece casi un liberal al lado de la intransigencia totalitaria que destilan todas las respuestas de su joven compañera de partido.  

Ambos ven valores positivos en ese terrorífico régimen que fue la Unión Soviética. Pese a los más de cien millones muertos que ha provocado esta ideología, Esther López dice alegremente que el comunismo "en lo fundamental sigue siendo lo mismo que era. Los valores son los mismos: el reparto equitativo de la riqueza, la socialización de los bienes de producción... Luchamos contra el capitalismo, a fin de cuentas, lo mismo que en el siglo XIX".

Esta militante del PCE hace gala de una dialéctica tan rancia –repite continuamente las expresiones más tópicas como "democracia burguesa", "libertad formal"– que hasta Willy Meyer tiene que reconvenirle para que en vez de "poder burgués" diga "poder de mercado". Contrasta asimismo que Meyer diga que se alegró del derribo, mientras que Esther López lo vea como "una tristeza".

Más allá de las habituales interpretaciones que hace la izquierda de lo que supuso la caída del Muro: "fue la victoria del imperialismo", "la URSS se echó a perder porque el ideario comunista no se llegó a aplica", lo más llamativo son las opiniones de esta militante sobre cuestiones de actualidad como la dictadura cubana o la política antiterrorista.

De Cuba dice que "es la democracia más profunda que he vivido yo en cualquier país. En España no hay una democracia garantizada". Pero no se queda ahí. Elogia a los siniestros Comités de Defensa de la Revolución –esos órganos represivos formados por chivatos y energúmenos que actúan en cada rincón de Cuba apara amedrentar a la oposición democrática  por fomentar "la democracia participativa enorme en los barrios". Aunque dice no compartir "el sistema de partido único", considera que "es un sistema mucho más democrático y participativo del que tengo yo aquí en el Parlamento español". Cuando Esther López llega a decir que "en Cuba hay tantos presos políticos como en España", Willy Meyer tiene que desmarcarse de nuevo: "No, bueno, yo eso no lo comparto". Eso sí, ninguno de los dos firmaría una petición para se libere a los presos políticos cubanos porque, dicen, Cuba está en guerra por el bloqueo y hay un estado de excepción.

El periodista de El País les pregunta por la situación en el País Vasco y en concreto las últimas detenciones de dirigentes proetarras. De nuevo, Esther López nos enseña qué es ser comunista hoy en día. Su respuesta: "Esas detenciones no se sostienen. Si se acaba con la vía política, la única que les vamos a dejar a los independentistas va a ser la terrorista. No se puede detener tan alegremente porque entonces pierdes la razón, así se enquista el conflicto. Son detenciones arbitrarias, un ataque. Por eso decía que claro que hay presos políticos en España". Y, por último, al preguntarle directamente si Otegi es un preso político, responde "es que no sé si decir eso porque..."

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