LD (EFE) Sin desvelar sus fuentes, el periódico Kommersant afirma que la preocupación sin precedentes de Israel obedece al propósito de Moscú de vender a Damasco modernos sistemas de misiles tácticos operativos Iskander-E, con un alcance de hasta 280 kilómetros.
El despliegue de estos sistemas en la línea de demarcación en los altos de Golan pondría en la zona de alcance de esos misiles casi todo el territorio de Israel, incluido el desierto de Neguev con el centro nuclear de Dimona, y prácticamente todas las grandes ciudades a excepción del puerto de Eilat, en el mar Rojo.
Según la prensa israelí, Tel-Aviv ha avisado a su aliado, EEUU, sobre un brusco agravamiento de sus relaciones con Moscú en los primeros días del nuevo año a raíz de "un problema altamente secreto" que motivó reuniones de emergencia del Gobierno de Israel. Medios israelíes y de países árabes supusieron que esa crisis soterrada podía obedecer a algún escándalo de espionaje o a posibles propósitos de Rusia de vender materiales nucleares o armas a Irán.