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Un militar estadounidense es acusado de asesinar en Bagdad a un iraquí herido en agosto pasado

Un oficial del Ejército de EEUU fue acusado de asesinato por matar a un iraquí herido en agosto pasado en un suburbio de Bagdad. El anuncio se produce mientras las autoridades militares investigan el posible asesinato de otro iraquí herido a manos de un infante de Marina en una mezquita de la ciudad de Faluya, en un incidente que fue recogido por un equipo de televisión.

LD (EFE) El segundo teniente Erick Anderson fue acusado de asesinato y conspiración para cometer el asesinato de un iraquí que se encontraba herido tras un ataque estadounidense contra Bagdad, según indica un comunicado oficial emitido por la Primera División de Caballería del Ejército de EEUU, actualmente destacada en Irak.
 
La investigación intenta determinar si Anderson dio la orden para que dos soldados remataran a un iraquí gravemente herido y a punto de morir. Los dos soldados ya fueron acusados de asesinato en septiembre. Este incidente ocurrió en el conflictivo suburbio de Sader City, en la capital iraquí, de mayoría chií.
 
Mientras, las televisiones árabes aún repetían las imágenes tomadas por un camarógrafo que trabaja para la cadena estadounidense NBC en las que se muestra a un soldado de EEUU asesinando a sangre fría a un iraquí desarmado en una mezquita de Faluya. Mientras el reportero gráfico tomaba planos de al menos cinco terroristas que parecían muertos, varios soldados escudriñaban el lugar, que había sido atacado el viernes por el Ejército estadounidense. En un momento dado se escucha a uno de los marines decir, en referencia a uno de aquéllos: "Se está haciendo el muerto. Éste se está haciendo el muerto". Acto seguido, le descerraja varios tiros. “Ahora está muerto”, dice a continuación.
 
 “El marine ha sido retirado del campo de batalla y está pendiente de los resultados de la investigación”, ha afirmado este martes el general John Sattler, comandante de la Primera División de la Infantería de Marina, por medio de un comunicado que añade: "seguimos la Ley de Conflictos Armados y nos atenemos a un alto grado de responsabilidad". La investigación determinará si el soldado actuó en defensa propia o si violó las reglas militares e infringió la referida ley.

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