LD (EFE) El estadounidense Ahmed Abu Alí fue declarado culpable este martes por un jurado federal de varios delitos, incluyendo conspiración para asesinar al presidente de EEUU, George Bush, y de formar parte de la red terrorista Al-Qaeda. Los doce miembros del jurado desestimaron la afirmación del acusado de que las autoridades saudíes le torturaron para extraer una falsa confesión.
El juez federal Gerald Bruce fijó tras el proceso en Alexandria (Virginia) la próxima cita para emitir la sentencia el día 17 de febrero de 2006, fecha en la que Abú Alí podría ser condenado a cadena perpetua, la pena máxima a la que se enfrenta.
Abú Alí, de 24 años, nació en EEUU y es hijo de un ciudadano jordano. El joven, que se crió en Falls Church (Virginia), dijo a las autoridades tras ser arrestado en una universidad de Arabia Saudí, en junio de 2003, que era un integrante de la banda terrorista Al-Qaeda y confesó haber tramado varias actividades terroristas, entre ellas un plan para asesinar a Bush.
Los fiscales indicaron durante el juicio que el joven también aseguró que entre sus planes figuraba el de convertirse en líder de una célula terrorista de Al-Qaeda en EEUU. Abú Alí permaneció veinte meses bajo custodia de Arabia Saudí antes de ser enviado a EEUU este año para enfrentarse a juicio. La defensa argumentó en su favor que el joven había sido torturado por los servicios secretos saudíes, conocidos como "Mubahith".
Según afirmó durante el juicio Stephen Campbell, uno de los fiscales federales, "las pruebas abrumadoras establecen que el acusado fue reclutado y entrenado para convertirse en un terrorista de Al-Qaeda". Campbell se refirió a declaraciones hechas por Abú Alí en las que afirmó que él y otros miembros de la red terrorista que dirige el millonario saudí Osama ben Laden discutieron en Arabia Saudí la forma de dar muerte a Bush.
Abú Alí, de 24 años, nació en EEUU y es hijo de un ciudadano jordano. El joven, que se crió en Falls Church (Virginia), dijo a las autoridades tras ser arrestado en una universidad de Arabia Saudí, en junio de 2003, que era un integrante de la banda terrorista Al-Qaeda y confesó haber tramado varias actividades terroristas, entre ellas un plan para asesinar a Bush.
Los fiscales indicaron durante el juicio que el joven también aseguró que entre sus planes figuraba el de convertirse en líder de una célula terrorista de Al-Qaeda en EEUU. Abú Alí permaneció veinte meses bajo custodia de Arabia Saudí antes de ser enviado a EEUU este año para enfrentarse a juicio. La defensa argumentó en su favor que el joven había sido torturado por los servicios secretos saudíes, conocidos como "Mubahith".
Según afirmó durante el juicio Stephen Campbell, uno de los fiscales federales, "las pruebas abrumadoras establecen que el acusado fue reclutado y entrenado para convertirse en un terrorista de Al-Qaeda". Campbell se refirió a declaraciones hechas por Abú Alí en las que afirmó que él y otros miembros de la red terrorista que dirige el millonario saudí Osama ben Laden discutieron en Arabia Saudí la forma de dar muerte a Bush.