LD (EFE) Mohammed Shakil (treinta años), Waheed Ali (veintitrés) y Sadeer saleem (veintiséis) han comparecido este sábado ante el tribunal de Westminster, Londres, cuyo titular, el juez Timothy Workman ha decretado mantenerlos bajo prisión preventiva hasta el veinte de abril, fecha en que tendrá lugar una audiencia preliminar en el juzgado penal de Old Bailey.
Los tres hombres, que comparecieron ante el magistrado, están acusados de conspirar, entre el primero de noviembre de 2004 y el veintinueve de junio de 2005, con los autores de la masacre del siete de julio de 2005 en Londres. Los acusados residen en Leeds, una ciudad del norte de Inglaterra.
En concreto, la Fiscalía del Estado británico acusa a los tres individuos de conspirar "de forma ilegal y maliciosa" para causar "explosiones en el sistema de transporte de Londres y/o en atracciones turísticas de Londres". Aunque los cargos no especifican esos lugares turísticos, la prensa británica asegura que se trata de objetivos como el Big Ben (la famosa torre del Parlamento británico), la plaza de Trafalgar, el "Ojo de Londres" y el palacio de Buckingham, residencia oficial de la reina Isabel II.
Según la Fiscalía, los tres hombres participaron en labores de "reconocimiento y planificación" previas a los atentados del 7-J con el fin de conspirar con los "responsables últimos" de los ataques. Durante la vista, los acusados se limitaron a confirmar sus nombres y fechas de nacimiento, en tanto que un único imputado, Sadeer Saleem, solicitó la libertad bajo fianza, pero el juez denegó la petición.
Los tres presuntos terroristas resultaron detenidos el pasado veintidós de marzo en una operación conjunta de los servicios secretos británicos y la Policía. Shakil y Ali fueron arrestados en el aeropuerto de Manchester (norte de Inglaterra) cuando se disponían a embarcar en un avión con destino a Pakistán, mientras que Saleem fue detenido en un domicilio de Leeds.