Un diputado socialista tacha de "penoso" el apoyo de Zapatero a Sarkozy

En un artículo publicado en su página personal de Internet, que recoge Europa Press, Pérez Tapias, diputado por Granada adscrito a la corriente de Izquierda Socialista, critica que ninguno de los líderes europeos osara ayer a "poner objeciones mínimamente serias" a una medida que, en su opinión, es "tan detestable como demagógica".

Y es que, a su juicio, resulta "sospechosa" tanta unanimidad a la hora de "descalificar" –Zapatero fue uno de lo más duros– a la comisaria europea de Justicia, Vivianne Reding, por criticar las medidas "discriminatorias" hacia los colectivos de gitanos rumanos que está ejecutando el Gobierno galo. "Al parecer –destaca–, nadie se acordó no sólo de la desfachatez arrogante de Sarkozy tratando de justificar las expulsiones de gitanos en la manera en que lo hace, sino que ni tan siquiera se tuvo en cuenta su chulesca respuesta a Reding al decirle que, si quería, podía llevarse los romaníes a Luxemburgo".

El diputado socialista considera que esta forma de actuar "no se atenúa en nada" diciendo que lo que pretende Sarkozy es parecido a lo que hizo su homólogo italiano, Silvio Berlusconi, tiempo atrás porque, en su opinión, eso sólo confirma "la berlusconización" de los gobiernos europeos y, por ende, de la UE en su conjunto". Así las cosas, Pérez Tapias, tirando de lenguaje informático, subraya que la ciudadanía europea debe andar "olvidada en algún fichero del disco duro de la UE", un disco duro, dice, que está "contaminado por el virus de la xenofobia con los consiguientes 'spams' de populismo y demagogia".

"Estamos en la fase en la que la crisis está empezando a sacar a flote lo peor de nosotros", resume el socialista granadino, quien pone como ejemplo de esta afirmación lo ocurrido esta mañana en Badalona, donde la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, ha estado con una diputada del partido de Sarkozy "a la búsqueda" de campamentos de romaníes para trasladar a España, "desde la marca catalana", el rechazo a esa colectividad y, por extensión, a la inmigración en su conjunto. "¡Mucho más que impresentable!", enfatiza.

En este contexto, Pérez Tapias señala que la UE debe empezar a pensar "en serio qué quiere ser de mayor". "Por aquí, en medio de tantos giros, al parecer tan periféricos que no afectan a los principios, vamos a tener que empezar a hablar en serio de éstos, de los principios", concluye.