Aunque situada más al norte que las extensas provincias sureñas de Helmand y Kandahar, donde los talibanes tienen algunos de sus principales feudos, Uruzgan mantiene estrechos lazos étnicos con el tercio meridional del país, especialmente con la limítrofe Kandahar.
En Helmand este jueves se registró otro atentado suicida, que acabó con la vida de un policía e hirió a otras cinco personas, cinco de ellas agentes, según el mando militar de la OTAN.
La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), misión bajo mando de la OTAN, explicó en un escueto comunicado que un suicida hizo estallar un artefacto explosivo en un vehículo en el distrito helmandí de Musa Qala.