LD (Europa Press) Mark Falcoff comparó los regímenes populistas con las democracias liberales y señaló que el populismo revolucionario "está libre para hacer toda clase de promesas demagógicas, mientras la democracia liberal no se lo puede permitir" ya que el populismo "no tiene ningún sentido de la responsabilidad".
Según el académico, otro de los principales problemas de los gobiernos latinoamericanos, además de esta tendencia al populismo, es la mala aplicación de las reformas sociales. "Los gobiernos latinoamericanos recurren a préstamos internacionales para evitar sus obligaciones económicas y aplazar así la aplicación de las reformas necesarias", dijo.
El experto destacó, además, que, a pesar de repetirse cíclicamente, el populismo en América Latina "nunca ha mejorado las condiciones de vida de la gente, salvo temporalmente y a corto plazo". "Viven y se extinguen sin dejar huella, sin construir instituciones duraderas", añadió, poniendo de nuevo como ejemplo a Venezuela donde, dijo, la subida de los precios del petróleo no ha supuesto una reducción del nivel de pobreza.
Así, concluyó que "el gran desafío" para Latinoamérica es lograr encontrar fórmulas para hacer funcionar mejor la democracia liberal, y conseguir así un fortalecimiento de las instituciones, "elemento vital para el progreso de la región".