Aquí tenemos el contrapunto al tercermundista de Morales. Otro americano por el que corre la sangre de los primeros pueblos que ha cambiado su mentalidad, como han hecho otros en los Estados Unidos. No es que de la noche a la mañana el Perú reduzca su tasa de miseria (que no de pobreza) pero hay que empezar. Sería todo un ejemplo en América.