L D (Agencias) El Ejército cree que el adolescente, de 14 años (en un primer momento se informó de que tenía 8), pretendía detonar el cinturón junto a los soldados del puesto de control o en las proximidades de una base militar cercana.
"Apareció un chico con un jersey rojo de talla muy grande que se acercaba hacia nosotros de manera muy sospechosa", relató el oficial israelí Tamir Mirad. Al notar que llevaba algo bajo la prenda, los soldados le apuntaron con sus armas y le instaron a quedase quieto. Acto seguido, le pidieron que se quitara el jersey. Fue entonces que vieron el cinturón explosivo, de color gris.
"Nos dijo que no quería morir. No quería inmolarse", añadió Mirad. Después, los artificieros se sirvieron de un robot por control remoto para desprender el cinturón del cuerpo del adolescente. Trasladado el artefacto a un lugar seguro, procedieron a su detonación.
El adolescente atiende por el nombre de Hosni Mohamed Bilal Abdu, y es vecino del barrio de Masahiya de la localidad de Naplusa. Hosni Mohamed dijo a los soldados que recibió el equivalente a 20 euros por perpetrar un atentado suicida.
Le prometieron tener sexo con 72 vírgenes en el Paraíso y 1.000 shekels
"La única manera de que tenga sexo con 72 vírgenes en el Jardín del Edén es haciéndome estallar", dijo el chico a los investigadores, según refiere el diario Jerusalem Post. Y agregó: "Ellos me dijeron que esa era la única manera, y me prometieron que darían a mi madre 1.000 shekels si lo hacía".
La familia del adolescente ha explicado que Hosni Mohamed padece un retraso mental. "No sabe nada –aseguró su hermano Hosni, en declaraciones recogidas por la agencia EFE y el Jerusalem Post–.Tiene la inteligencia de un niño de 12 años".
Según fuentes militares israelíes, el grupo terrorista Tanzim (encuadrado en el movimiento Al Fatah, que comanda el presidente de la ANP, Yaser Arafat) ha asumido la responsabilidad del intento de atentado suicida.
Hace una semana detuvieron a otro niño con un paquete explosivo
Hace una semana, en el mismo puesto de control, las fuerzas israelíes impidieron que otro niño, de
12 años, pasara con un paquete que contenía unos diez kilos de explosivo.
En aquella ocasión, el menor fue liberado tras ser interrogado y comprobarse que ignoraba que portaba el explosivo. Abdala Kurán, vecino del campo de refugiados de Balata, al este de Naplusa, se ganaba la vida transportando paquetes de un lado a otro del puesto de control militar.
Según datos del Ministerio de Defensa, desde el inicio de la Intifada de Al-Aqsa, en septiembre de 2000, al menos 29 palestinos menores de 18 años han llevado a cabo atentados suicidas y otros 22 han perpetrado "ataques de sacrificio" (por ejemplo, abrir fuego indiscriminadamente en centros israelíes hasta que son abatidos por las fuerzas de seguridad). Otros 40 menores han sido arrestados bajo la acusación de intentar perpetrar ataques contra objetivos israelíes.
AI denuncia la "abominación" que supone utilizar niños en atentados suicidas
Amnistía Internacional (AI) ha denunciado este miércoles la utilización de niños en la comisión de atentados suicidas por parte de grupos terroristas palestinos.
AI "ha condenado repetidamente los atentados suicidas y otros ataques contra civiles por parte de grupos armados palestinos, porque son crímenes contra la humanidad", se lee en el comunicado que ha emitido, desde su sede londinense, la organización pro derechos humanos.
"Utilizar niños –continúa la nota– para llevar a cabo o asistir en ataques armados de cualquier tipo es una abominación. Pedimos a los líderes palestinos que denuncien públicamente estas prácticas".