L D (Agencias) Un total de 27 iraquíes resultaron muertos por disparos de soldados de la coalición en Balad (150 kilómetros al noroeste de Bagdad), informó el Mando Central estadounidense. Según la fuente, un grupo de personas atacó a una patrulla integrada por soldados de la Cuarta División de Infantería, que respondieron al fuego y mataron a cuatro de los atacantes, forzando a los otros a huir, aunque en una persecución posterior mataron a otros 23. Estas muertes se añaden a las setenta bajas durante la fase inicial de la operación "Península Strike".
Fuentes militares estadounidenses han confirmado que al menos 4.000 soldados estadounidenses participan en la citada operación (la mayor lanzada desde el fin de la guerra en Irak) cuyo objetivo es destruir un campo de entrenamiento para terroristas, ubicado en un área cercana a la ciudad de Balad, próxima al río Tigris, a unos 150 kilómetros al noreste de Bagdad. Fuentes militares han confirmado que al menos setenta posibles terroristas han sido abatidos. Un militar ha resultado herido.
La operación inició a primera hora de este jueves y se mantiene este viernes, según confirmó un portavoz del Ejército de EEUU. La ofensiva, dijo el funcionario desde el anonimato, es parte de "el continuado esfuerzo para erradicar a los leales al partido Baaz, grupos paramilitares y otros elementos subversivos". Según publica el periódico estadounidense The New York Times , el ataque se inició con un bombardeo sorpresa al que siguió la entrada en la zona de tropas de la División 101 Aerotransportada. Un helicóptero fue atacado pero nadie de su tripulación resultó herido.
Las altas instituciones de el Ejército estadounidense han asegurado que los partidarios de Sadam Husein están detrás de la ola de atentados contra las tropas que han causado más de 40 muertes desde el fin del régimen, hace ya más de dos meses.
Fuentes militares estadounidenses han confirmado que al menos 4.000 soldados estadounidenses participan en la citada operación (la mayor lanzada desde el fin de la guerra en Irak) cuyo objetivo es destruir un campo de entrenamiento para terroristas, ubicado en un área cercana a la ciudad de Balad, próxima al río Tigris, a unos 150 kilómetros al noreste de Bagdad. Fuentes militares han confirmado que al menos setenta posibles terroristas han sido abatidos. Un militar ha resultado herido.
La operación inició a primera hora de este jueves y se mantiene este viernes, según confirmó un portavoz del Ejército de EEUU. La ofensiva, dijo el funcionario desde el anonimato, es parte de "el continuado esfuerzo para erradicar a los leales al partido Baaz, grupos paramilitares y otros elementos subversivos". Según publica el periódico estadounidense The New York Times , el ataque se inició con un bombardeo sorpresa al que siguió la entrada en la zona de tropas de la División 101 Aerotransportada. Un helicóptero fue atacado pero nadie de su tripulación resultó herido.
Las altas instituciones de el Ejército estadounidense han asegurado que los partidarios de Sadam Husein están detrás de la ola de atentados contra las tropas que han causado más de 40 muertes desde el fin del régimen, hace ya más de dos meses.