LD (EFE) El mando de las fuerzas militares de EEUU desplegadas en Afganistán ha informado que al menos veinte terroristas talibanes han muerto en enfrentamientos registrados en las últimas horas en Kandahar. Allí, dos artefactos estallaron al paso de un convoy de la Policía local y tropas aliadas que escoltaban a veinticuatro camiones con material de aprovisionamiento. En el ataque murió un conductor afgano y tres soldados.
Después de ser evacuadas las víctimas, el convoy prosiguió su camino con destino al distrito de Sangin, en la provincia meridional de Helmand, cuando fue atacado con granadas y armas ligeras por un grupo de terroristas. Durante unas diez horas se prolongó el enfrentamiento. Los militares contaron con apoyo aéreo.
Ello originó un combate que se prolongó durante diez horas y en el que las fuerzas conjuntas, que contaron con apoyo aéreo, mataron a "cerca de dos docenas de combatientes", según el comunicado.
En tanto, en la provincia de Kunduz, en el norte afgano, dos civiles han muerto y otros dos resultaron heridos cuando un terrorista suicida hizo estallar un coche-bomba al paso de un convoy de las fuerzas de las tropas de la Fuerza para la Asistencia a la Seguridad (ISAF).
La ISAF, bajo mando de la OTAN, tiene desplegados unos 34.000 efectivos, de 37 países, en territorio afgano. La violencia se ha recrudecido en el país asiático desde principios de esta primavera, después de una tregua "de facto" en invierno a causa de las duras condiciones meteorológicas.
La ISAF, bajo mando de la OTAN, tiene desplegados unos 34.000 efectivos, de 37 países, en territorio afgano. La violencia se ha recrudecido en el país asiático desde principios de esta primavera, después de una tregua "de facto" en invierno a causa de las duras condiciones meteorológicas.