LD (EFE) Cerca de la aldea Tacueyó del municipio de Toribío (Cauca), a unos 450 kilómetros al suroeste de Bogotá, justo en la zona montañosa conocida como Cuchilla la Calera, soldados colombianos han descubierto una "escuela de terrorismo" que era utilizada por miembros de la autodenominada "columna móvil Jacobo Arenas" de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
En el lugar, a unos 2.870 metros sobre el nivel del mar, se destruyó una construcción "utilizada para instruir a grupos especiales en la fabricación y empleo de artefactos explosivos improvisados y, del mismo modo, se destinaba para el entrenamiento de asaltos a localidades urbanas".
El campamento tenía áreas de instrucción, trincheras, puestos de observación, zanjas de arrastre, cocina, sala de televisión, albergues para un número aproximado de treinta hombres, y un depósito que almacenaba más de una tonelada de leña y otros elementos. En el depósito había decenas de uniformes de fatiga, granadas de fabricación rudimentarias y cordón detonante, entre otros elementos.
En el mismo lugar las tropas localizaron un túnel de unos 150 metros de longitud que, se presume, era utilizado por los terroristas para evadir la acción de las aeronaves de la Fuerza Aérea, que apoyan las operaciones. Para el brigadier general, Hernando Pérez Molina, comandante de la III Brigada, el hallazgo de la escuela y el túnel debilita a la "columna móvil Jacobo Arenas", y es "una disminución significativa de su capacidad para proyectar ataques terroristas contra la población civil de la región y sus recursos".