Sharon acusa a los europeos de "antisemitas" y critica la inacción de la UE

L D (EFE) En una entrevista con el sitio de Internet de informaciones europeas EUpolitix, Sharon ha explicado que lo que hay en Europa "es un antisemitismo que ha existido siempre y no se trata verdaderamente de un fenómeno nuevo".

Además, ha dicho que los gobernantes europeos "no reaccionan lo suficiente para luchar contra el antisemitismo" y desarrollan una política "subjetiva" con respecto a Oriente Medio.

El dirigente israelí reaccionó así al último Eurobarómetro, un sondeo elaborado por la Comisión Europea, en el que los ciudadanos europeos situan a Israel a la cabeza de los países que suponen una amenaza para la paz mundial y en el que también aparecen Estados Unidos, Irán y Corea del Norte. Sharon afirma igualmente que el crecimiento de la comunidad musulmana constituye además una amenaza para los judíos que viven en Europa. "El simple hecho de que los musulmanes sean numerosos, aproximadamente unos 17 millones en la Unión Europea, supone un problema político", dice el dirigente israelí.

 

El primer ministro israelí también rechaza hacer distingos entre los antisemitas y aquellos ciudadanos que critican la política de Israel, para subrayar que las políticas subjetivas de los países europeos –siempre dándole cobertura a la Autoridad Nacional Palestina, y a su líder Yacer Arafat– empañan su papel en el marco del proceso de paz. "Europa podría haber jugado un papel más fuerte e incluso central si hubiera aplicado una política más equilibrada en Oriente Medio", afirma Sharon, para reiterar que "el Estado de Israel no puede permitirse poner su destino en las manos de los europeos, conocidos por tener una política desequilibrada", agrega.

Sharon felicita sin embargo a Italia por su lucha contra las opiniones negativas en Europa y, en especial, a su primer ministro, Silvio Berlusconi, por hacer presión pública para una futura adhesión de Israel a la UE. También se refiere a las relaciones de Europa con Irán y señala que "debemos establecer la conexión entre las relaciones económicas de Irán y el desarrollo nuclear de ese país". Por ello, agrega, "tenemos que permanecer prudentes. Europa tiene intereses económicos en Irán, debemos estar en guardia e insistir para que las inspecciones" sobre sus capacidades nucleares "sean reales".