
LD (Agencias) El ministro de Unificación de Corea del Sur, Chung Dong-Young, anunció que el Gobierno al que pertenece prevé que, junto con Rusia, China, EEUU y Japón, el régimen comunista de Pyongyang recibirá unos quince mil millones de dólares en ayuda energética en compensación por el desmantelamiento de su programa militar nuclear.
Dong-Young explicó que la ayuda se producirá en tres etapas comenzando con el suministro de fuertes cantidades de petróleo, provisión eléctrica y finalmente un reactor nuclear, todo construido en un periodo de más de trece años. Los cinco países esperan pagar una cantidad equivalente a 146 millones de dólares para suministro de petróleo, y más de 973 millones para la construcción de un reactor. Además, Corea del Sur gastará como mucho 9.400 millones de dólares más para provisión directa de electricidad, comentó Chung.
Veinticuatro horas después de firmado el tratado en Pekín, Corea del Norte lanzó sus comentarios insistiendo en que no abandonaría sus programas nucleares a menos que Washington le proporcione reactores de agua ligera primero. EEUU rechazó inmediatamente esta posibilidad.
En Pyongyang, fuentes de los servicios secretos del régimen estalinista han declarado a la agencia de noticias surcoreana Yonhap indicaron que el dictador Kim Jong-il ha señalado que vería con mucho interés la visita de alguno de los miembros de la cúpula dirigente de EEUU, incluido su presidente, George Bush, para abrir camino a la normalización bilateral. La visita ideal, explicaron, sería la de la secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, o, en su defecto, la de George Bush padre.