L D (EFE) El Ministerio del Interior aseguró que recibe a diario nuevas informaciones que "apuntan claramente" a que el asesinato de Djindjic, el pasado día 12, "es parte del complot de las llamadas fuerzas patrióticas". Estas fuerzas, según el comunicado oficial, están encabezadas por criminales de guerra, "personas que se enriquecieron durante la guerra, patrocinadores e inspiradores de la política de crímenes de los partidos del régimen de Slobodan Milosevic".
Según la nota, "los testigos de las revelaciones de los crímenes más monstruosos hablan de los fuertes vínculos entre los supuestos defensores de los intereses nacionales del pueblo serbio con Milorad Lukovic, alias Legija", ex comando de los servicios de seguridad estatales que presuntamente organizó el atentado contra Djindjic. El Ministerio afirmó que "estos patriotas falsos", en cooperación con bandas mafiosas "y en nombre del matrimonio Milosevic-Markovic asesinaban a sus rivales políticos, apaleaban a seguidores de partidos opositores y maltrataban a los ciudadanos que se les oponían". Estos delitos se efectuaban también "para necesidades" de los hoy ex gobernantes Partido Socialista Serbio (SPS, de Milosevic), Izquierda Unida Yugoslava (JUL, de Markovic) y del Partido Radical Serbio (SRS, del ultranacionalista Vojislav Seselj), según la policía.
Por esos "méritos para el régimen criminal", las bandas criminales, y especialmente el clan de Zemun de Lukovic, "disfrutaban de todos los privilegios", incluido el permiso para dedicarse al narcotráfico, liquidar a todos aquellos que les molestaban y usar pasaportes diplomáticos. Las pruebas recopiladas de momento indican que "los fundadores y cabecillas de este grupo político-criminal", ante todo Lukovic, obedecían sólo a "intereses mafiosos" y que sus viajes supuestamente oficiales a Colombia, Rusia, China y Albania "estaban vinculados exclusivamente al crimen (asesinatos, robos, secuestros y narcotráfico)".
Según la nota, "los testigos de las revelaciones de los crímenes más monstruosos hablan de los fuertes vínculos entre los supuestos defensores de los intereses nacionales del pueblo serbio con Milorad Lukovic, alias Legija", ex comando de los servicios de seguridad estatales que presuntamente organizó el atentado contra Djindjic. El Ministerio afirmó que "estos patriotas falsos", en cooperación con bandas mafiosas "y en nombre del matrimonio Milosevic-Markovic asesinaban a sus rivales políticos, apaleaban a seguidores de partidos opositores y maltrataban a los ciudadanos que se les oponían". Estos delitos se efectuaban también "para necesidades" de los hoy ex gobernantes Partido Socialista Serbio (SPS, de Milosevic), Izquierda Unida Yugoslava (JUL, de Markovic) y del Partido Radical Serbio (SRS, del ultranacionalista Vojislav Seselj), según la policía.
Por esos "méritos para el régimen criminal", las bandas criminales, y especialmente el clan de Zemun de Lukovic, "disfrutaban de todos los privilegios", incluido el permiso para dedicarse al narcotráfico, liquidar a todos aquellos que les molestaban y usar pasaportes diplomáticos. Las pruebas recopiladas de momento indican que "los fundadores y cabecillas de este grupo político-criminal", ante todo Lukovic, obedecían sólo a "intereses mafiosos" y que sus viajes supuestamente oficiales a Colombia, Rusia, China y Albania "estaban vinculados exclusivamente al crimen (asesinatos, robos, secuestros y narcotráfico)".