L D (Agencias) El encuentro en Buenos Aires fue organizado en forma conjunta por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Círculo de Montevideo, constituido en 1996 e impulsado por el ex presidente uruguayo Julio María Sanguinetti. "Sin duda hubo un vaciamiento de la política, que se desvaneció frente al economicismo, y lo que estamos debatiendo es cómo puede ir recuperando el espacio público", apuntó Sanguinetti sobre la iniciativa, que abarca a 18 países de la región. A la cita también concurrieron los ex presidentes Eduardo Frei (Chile) y Osvaldo Hurtado (Ecuador), además de autoridades del PNUD y el director general del proyecto, el ex canciller argentino Dante Caputo. Antes de entrar a la reunión, Caputo destacó que "este es el trabajo sobre gobernabilidad más importante del mundo" y sostuvo que las Naciones Unidas lo enfocaron sobre América Latina porque la región "vive su periodo de más larga duración y de mayor expansión de la democracia en toda su historia". "Más de 20 años ininterrumpidos de democracia en la mayoría de nuestros países dan para saber cómo está y si queremos mantenerla vale la pena saber dónde están sus principales problemas", explicó.
Más Estado, pero no se confía en los Gobiernos
El proyecto incluye consultas a 200 líderes políticos, académicos y miembros destacados de organizaciones sociales, además de una encuesta de opinión representativa de los 400 millones de habitantes de la región realizada a casi 20.000 ciudadanos. Algunas de las conclusiones de esa medición son que "el 70 por ciento de los latinoamericanos pide más Estado, aunque esa misma gente desconfía tremendamente de los gobiernos" y que en la región "hay más demócratas que no demócratas, pero no son mayoría absoluta", apuntó Caputo. "También hay una percepción mayoritaria de que el poder real no está en la política sino en los sectores económicos y financieros y que los principales problemas son la pobreza, la desigualdad y el desempleo", agregó.
La intervención de González
A partir del proceso de análisis, consulta y discusión, se elaborará un "Informe sobre el Desarrollo Democrático en América Latina: su estado, percepciones ciudadanas, indicadores y agenda", que será presentado en noviembre próximo. En su ponencia sobre el "vaciamiento de la política" en la región, Felipe González apuntó a lo "chocante" del carácter "aparentemente contradictorio entre la recuperación de la democracia" en Latinoamérica y "la posterior reducción del compromiso ciudadano con la representación política". "En la región esta crisis se proyecta sobre Estados nacionales recién salidos de dictaduras o con estructuras débiles desde el punto de vista institucional, por obsolescencia o vicios de funcionamiento entre los poderes", opinó.
A juicio del ex jefe del Gobierno español, "el impacto de los fracasos de las políticas económicas" aplicadas en América Latina en los últimos años "en el deterioro de la política ha sido muy fuerte, pero no suficiente para explicar la situación resultante de esta experiencia de democratización". "El primer ejercicio debe encaminarse al análisis de las funciones del propio Estado Nación y de la política en la nueva era que empieza, la que podríamos identificar con la informacional o pos industrial", añadió. El proyecto involucra a Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Honduras, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela. La reunión iba a celebrarse en Lima, pero se decidió trasladarla a Buenos Aires por la conflictividad social que vive la capital peruana en los últimos días.
Más Estado, pero no se confía en los Gobiernos
El proyecto incluye consultas a 200 líderes políticos, académicos y miembros destacados de organizaciones sociales, además de una encuesta de opinión representativa de los 400 millones de habitantes de la región realizada a casi 20.000 ciudadanos. Algunas de las conclusiones de esa medición son que "el 70 por ciento de los latinoamericanos pide más Estado, aunque esa misma gente desconfía tremendamente de los gobiernos" y que en la región "hay más demócratas que no demócratas, pero no son mayoría absoluta", apuntó Caputo. "También hay una percepción mayoritaria de que el poder real no está en la política sino en los sectores económicos y financieros y que los principales problemas son la pobreza, la desigualdad y el desempleo", agregó.
La intervención de González
A partir del proceso de análisis, consulta y discusión, se elaborará un "Informe sobre el Desarrollo Democrático en América Latina: su estado, percepciones ciudadanas, indicadores y agenda", que será presentado en noviembre próximo. En su ponencia sobre el "vaciamiento de la política" en la región, Felipe González apuntó a lo "chocante" del carácter "aparentemente contradictorio entre la recuperación de la democracia" en Latinoamérica y "la posterior reducción del compromiso ciudadano con la representación política". "En la región esta crisis se proyecta sobre Estados nacionales recién salidos de dictaduras o con estructuras débiles desde el punto de vista institucional, por obsolescencia o vicios de funcionamiento entre los poderes", opinó.
A juicio del ex jefe del Gobierno español, "el impacto de los fracasos de las políticas económicas" aplicadas en América Latina en los últimos años "en el deterioro de la política ha sido muy fuerte, pero no suficiente para explicar la situación resultante de esta experiencia de democratización". "El primer ejercicio debe encaminarse al análisis de las funciones del propio Estado Nación y de la política en la nueva era que empieza, la que podríamos identificar con la informacional o pos industrial", añadió. El proyecto involucra a Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Honduras, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela. La reunión iba a celebrarse en Lima, pero se decidió trasladarla a Buenos Aires por la conflictividad social que vive la capital peruana en los últimos días.