L D (Agencias) El periódico estadounidense The New York Times publica en su página en Internet que el propio presidente iraquí, Sadam Husein, había ordenado a su hijo Qusay que “recogiera” más de mil millones de dólares del Banco Central de Irak, justo antes del inicio de los bombardeos aliados del 20 de marzo. El diario, que atribuyó su información a fuentes iraquíes no identificadas, manifestó que hasta ahora se desconoce la razón financiera para sacar el dinero de las bóvedas del banco y que no se informó a nadie sobre dónde sería llevado. "Cuando se recibe una orden de Sadam Husein no se pone en discusión", dijo uno de los funcionarios iraquíes que ocupó una alta posición en la citada institución bancaria.
Qusay Husein, segundo hijo varón del derrocado presidente, fue quien dirigió la “recolección” del dinero junto con Abid al-Hamid Mahmood, secretario personal del dictador. Los hechos ocurrieron menos de 24 horas antes de iniciarse el bombardeo estadounidense, dijo el funcionario, quien agregó que los dos hombres llegaron al banco con una carta de Sadam Husein en la que se les autorizaba a recoger el dinero. El funcionario indicó que el volumen físico del dinero (900 millones en billetes de 100 dólares y 100 millones en euros) era tan grande que se ocuparon tres camiones para sacarlo y dos horas para concluir la carga.
The New York Times señala que la confiscación de ese dinero fue confirmada por un funcionario del Departamento del Tesoro de EEUU asignado para participar, junto a funcionarios iraquíes, en la reconstrucción del sistema bancario y financiero del país. Las fuentes citadas por el diario indicaron que los mil millones de dólares constituirían alrededor de un tercio de las reservas que tenía el Banco Central de Irak en esos momentos. El rotativo indicó que se sospecha que el dinero fue sacado del país a través de Siria de la misma forma en que se cree que huyeron algunos altos funcionarios del gobierno de Sadam Husein.
Qusay Husein, segundo hijo varón del derrocado presidente, fue quien dirigió la “recolección” del dinero junto con Abid al-Hamid Mahmood, secretario personal del dictador. Los hechos ocurrieron menos de 24 horas antes de iniciarse el bombardeo estadounidense, dijo el funcionario, quien agregó que los dos hombres llegaron al banco con una carta de Sadam Husein en la que se les autorizaba a recoger el dinero. El funcionario indicó que el volumen físico del dinero (900 millones en billetes de 100 dólares y 100 millones en euros) era tan grande que se ocuparon tres camiones para sacarlo y dos horas para concluir la carga.
The New York Times señala que la confiscación de ese dinero fue confirmada por un funcionario del Departamento del Tesoro de EEUU asignado para participar, junto a funcionarios iraquíes, en la reconstrucción del sistema bancario y financiero del país. Las fuentes citadas por el diario indicaron que los mil millones de dólares constituirían alrededor de un tercio de las reservas que tenía el Banco Central de Irak en esos momentos. El rotativo indicó que se sospecha que el dinero fue sacado del país a través de Siria de la misma forma en que se cree que huyeron algunos altos funcionarios del gobierno de Sadam Husein.