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Sadam Husein desata una "caza de brujas" para tratar de impedir deserciones masivas en Irak

La amenaza de un ataque contra Irak ha provocado una desbandada a Siria de personajes clave del Ejército iraquí y del partido Baaz. Arabia Saudí, por su parte, rechazó una propuesta de EEUU para acoger a Sadam Husein si se exilia. Al parecer, el dictador estaba de acuerdo y exigía una indemnización de 2.200 millones de dólares.

L D (Agencias) Hace dos semanas, agentes secretos hicieron llegar a Sadam Husein una propuesta de la CIA para que se exiliara junto a sus principales colaboradores. Esta medida permitiría zanjar la crisis en el Golfo Pérsico. Washington y varios países árabes aliados le ofrecían total inmunidad. El dictador iraquí exigía, a cambio, una indemnización de 2.200 millones de dólares y que su destino final fuera Arabia Saudí. Sin embargo, las autoridades de Riad se negaron a acoger en su territorio a Husein. Fuentes “de toda solvencia” consultadas por el periódico español El Mundo confirmaron que la Casa Blanca informó al Gobierno español sobre este asunto.

El rotativo menciona también que los servicios secretos occidentales y árabes que operan en la zona han informado de que “en los últimos días algunos hombres de peso en el Ejército y en el (oficial) partido Baaz han abandonado Irak y se han trasladado a Siria, llevándose consigo a sus familias y gran cantidad de dinero”. Para evitar las deserciones en masa producto del miedo ante el más que previsible ataque estadounidense, Sadam Husein “ha desatado una auténtica caza de brujas”, aseguran los agentes. De hecho, el propio Husein afirmaba en la entrevista concedida a la CBS , que morirá en su país para preservar su honor.

Desde hace varias semanas, EEUU ha tratado de obtener el apoyo de varios países árabes para lograr convencer a Sadam Husein de que su exilio sería la única vía para detener una segunda Guerra del Golfo. Esta fórmula fue trasladada a por la delegación de Emiratos Árabes Unidos a los miembros de la Liga Árabe que durante el fin de semana celebraron una reunión en Egipto. La propuesta no fue incluida en las conclusiones finales porque varios de los presentes se pronunciaron en contra. Sin embargo, Saud al Faisal, ministro de Asuntos Exteriores Saudí declaró que varios países árabes apoyan el exilio del dictador “aunque lo rechacen luego ante la prensa”.

Otros, en cambio, se oponen “porque buscan el modo de activar la guerra contra Irak”, dijo. Por lo pronto, la propuesta volverá a estar en la mesa de discusiones durante la cumbre islámica que Qatar convocará el próximo 5 de marzo. Diversos rotativos estadounidenses ya publicaron hace un par de semanas que Arabia Saudí tenía otro plan alternativo: había ofrecido importantes sumas de dinero y total inmunidad a los miembros del Gobierno de Sadam Husein que protagonizaran un alzamiento contra el dictador. De hecho, lo que más teme Sadam en estos momentos es una crisis interna que provoque su caída y, seguramente, su muerte, ya que si EEUU ataca a su país cree que podrá salvar su vida escapándose.

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