L D (EFE) La televisión pública británica ha desvelado que el dictador iraquí Sadam Husein fue capturado por las fuerzas estadounidenses porque le traicionó uno de sus guardaespaldas más fieles. De acuerdo con la BBC, Al-Musslit, que se encontraba con Husein cuando éste huyó de Bagdad al ser la ciudad tomada por los soldados de EEUU el 9 de abril de 2003, fue detenido en la capital iraquí el pasado diciembre.
Horas después de su arresto, el guardaespaldas, apodado "el hombre gordo" y figura clave de la seguridad de Sadam, fue conducido a Tikrit, donde confesó, finalmente, el lugar en el que se ocultaba el ex dictador. Sin embargo, Al-Musslit no cobrará la recompensa de 25 millones de dólares (20 millones de euros) ofrecida por Estados Unidos a quien diera una pista sobre el paradero del depuesto mandatario, ya que no lo hizo de forma voluntaria, según la cadena. Así lo ha reconocido además el general de división Ray Odierno, que señaló que "el Tesoro de EEUU se va a quedar con el dinero" de la recompensa. Odierno negó que la fuente de la valiosa información, a la que definió como un "personaje sospechoso", hubiera sido torturada.
Hasta la fecha, el Gobierno estadounidense se ha resistido a divulgar la identidad de la persona que reveló donde se escondía el derrocado presidente iraquí. El coronel James Hickey, de la Cuarta División de Infantería del Ejército norteamericano, la unidad que capturó a Sadam Husein, se ha limitado a decir que el informante es "un hombre de mediana edad que se fue a la porra".
Horas después de su arresto, el guardaespaldas, apodado "el hombre gordo" y figura clave de la seguridad de Sadam, fue conducido a Tikrit, donde confesó, finalmente, el lugar en el que se ocultaba el ex dictador. Sin embargo, Al-Musslit no cobrará la recompensa de 25 millones de dólares (20 millones de euros) ofrecida por Estados Unidos a quien diera una pista sobre el paradero del depuesto mandatario, ya que no lo hizo de forma voluntaria, según la cadena. Así lo ha reconocido además el general de división Ray Odierno, que señaló que "el Tesoro de EEUU se va a quedar con el dinero" de la recompensa. Odierno negó que la fuente de la valiosa información, a la que definió como un "personaje sospechoso", hubiera sido torturada.
Hasta la fecha, el Gobierno estadounidense se ha resistido a divulgar la identidad de la persona que reveló donde se escondía el derrocado presidente iraquí. El coronel James Hickey, de la Cuarta División de Infantería del Ejército norteamericano, la unidad que capturó a Sadam Husein, se ha limitado a decir que el informante es "un hombre de mediana edad que se fue a la porra".