Rodríguez Saá se compromete a crear tres millones de empleos en Argentina si gana las elecciones

L D (EFE) Gran parte de las propuestas apuntaron a explicar cómo haría el candidato para cumplir la ambiciosa promesa en un país estigmatizado por una alta tasa de desempleo, que alcanza el 17,8 por ciento de su población activa. Para generar trabajo, Rodríguez Saá, uno de los tres candidatos por el Partido Justicialista (peronista), en el poder, pondrá en marcha planes de alfabetización, construcción de viviendas, saneamiento de las cuencas inundadas y otras obras hídricas, en todos los casos privilegiando la mano de obra desocupada.

Entre esos programas está un plan de forestación para plantar 1.200 millones de árboles en seis meses, dando trabajo a un millón de desempleados. Con el objetivo de “dar una batalla patriótica al desempleo”, se congelarán los despidos durante un plazo de 180 días.

Rodríguez Saá también quiere combatir la pobreza y la indigencia, que padecen el 57,5 por ciento de los argentinos, con un “plan nutricional para que todas las familias tengan comida disponible en sus casas”. El candidato del Movimiento Nacional y Popular, el primero en hacer pública su propuesta de gobierno, reiteró que creará una empresa estatal integral de hidrocarburos y una compañía pública de ferrocarriles. Propuso la construcción de cinco líneas de tren de alta velocidad y la integración ferroviaria con el resto de los países del Mercado Común del Sur (MERCOSUR): Brasil, Paraguay y Uruguay.

Rodríguez Saá, que gobernó Argentina durante una semana a finales de 2002, prometió que si regresa a la Presidencia dará caducidad a todas las leyes y un plazo de seis meses para que el Parlamento ratifique aquellas que sean fundamentales. El candidato elevará la jubilación mínima hasta los 300 pesos (94 dólares) y el salario mínimo a 500 pesos (157 dólares), con la determinación de que el presidente no gane más de 3.000 pesos (940 dólares). Su plan de austeridad en el Estado incluye la derogación de todos los privilegios para los funcionarios, como las jubilaciones especiales y las partidas de uso reservado.