LD (Agencias) “Un cese al fuego que puede terminarse cualquier día no es suficiente”, señaló Powell, quien añadió que las organizaciones terroristas palestinas podrían usar esta tregua para mejorar “su capacidad de acción, probar nuevas armas o crear nuevas fábricas de bombas”. En conferencia de prensa, el secretario dijo que “lo que realmente necesitamos es un esfuerzo coordinado de parte de la Autoridad Palestina contra las organizaciones dentro de la comunidad palestina que tienen la capacidad de realizar atentados terroristas, como Hamas y Yihad Islámica”.
Además, Colin Powell afirmó que el Gobierno de EEUU “quiere que se termine la actividad de los asentamientos” e informó de que está dialogando con Tel Aviv sobre la “verja” de seguridad, “que en ciertos lugares es realmente un muro”, que Israel construye alrededor de Cisjordania. El gobierno israelí inició a mediados del año pasado la construcción de un complejo sistema de muros, vallas, alambradas, trincheras y sensores electrónicos a lo largo de la “línea verde”, que marcaba la frontera antes de la Guerra de 1967, aunque ha realizado modificaciones para incluir a asentamientos judíos en territorio palestino. Pero la Casa Blanca se opone a su construcción y podría incluso reducir su ayuda a Israel para proyectos de vivienda y comercio por esta causa, según indicaron esta semana medios de prensa estadounidenses.
Powell dijo que es apropiado para EEUU expresar a Israel que la verja es problemática cuando “entra en tierra que no está en el lado israelí de la línea verde o se inmiscuye de una forma que hace más difícil para nosotros defender un estado palestino viable o empieza a aislar ciertas ciudades y pueblos”. El secretario también presionó a los países vecinos y advirtió a Siria que “no debería seguir permitiendo que Damasco se use como cuartel general de organizaciones terroristas”.
Además, Colin Powell afirmó que el Gobierno de EEUU “quiere que se termine la actividad de los asentamientos” e informó de que está dialogando con Tel Aviv sobre la “verja” de seguridad, “que en ciertos lugares es realmente un muro”, que Israel construye alrededor de Cisjordania. El gobierno israelí inició a mediados del año pasado la construcción de un complejo sistema de muros, vallas, alambradas, trincheras y sensores electrónicos a lo largo de la “línea verde”, que marcaba la frontera antes de la Guerra de 1967, aunque ha realizado modificaciones para incluir a asentamientos judíos en territorio palestino. Pero la Casa Blanca se opone a su construcción y podría incluso reducir su ayuda a Israel para proyectos de vivienda y comercio por esta causa, según indicaron esta semana medios de prensa estadounidenses.
Powell dijo que es apropiado para EEUU expresar a Israel que la verja es problemática cuando “entra en tierra que no está en el lado israelí de la línea verde o se inmiscuye de una forma que hace más difícil para nosotros defender un estado palestino viable o empieza a aislar ciertas ciudades y pueblos”. El secretario también presionó a los países vecinos y advirtió a Siria que “no debería seguir permitiendo que Damasco se use como cuartel general de organizaciones terroristas”.