LD (EFE) Policías antimotines argentinos han liberado a dos guardianes de la cárcel de Coronda que habían sido tomados como rehenes por un grupo de reos que se habían amotinado tras un violento enfrentamiento entre bandas por el control del centro penitenciario. Trece de ellos resultaron muertos y seis más heridos.
El director del Servicio Penitenciario de Santa Fe, Fernando Rosúa, señaló que lo ocurrido en la cárcel Coronda "fue espantoso" y que varios de los presos heridos "están muy graves", con lo que podría aumentar el número de muertos. Explicó que todo empezó la noche de este lunes cuando presos de uno de los pabellones del penal se amotinaron, tomaron como rehenes a los guardianes y "aprovecharon la confusión para atacar" a los de otros dos pabellones.
Los amotinados, todos presos nacidos en la ciudad de Santa Fe, la capital provincial, "aprovecharon la confusión para atacar a los que son de la ciudad santafesina de Rosario y con quienes mantienen una antigua rivalidad", explicó y añadió que se sospecha que el ataque de la banda de santafesinos a la de los rosarinos fue en venganza por la muerte de un preso ocurrida hace dos días. Todos los muertos formaban parte de la banda de los rosarinos, once fueron degollados con puñales fabricados por los presos en la cárcel. Otros dos murieron quemados.