L D (Agencias) "Durante muchos años el Dalai Lama ha intentado derrocar al PCCh y subvertir el sistema socialista para restaurar su brutal feudalismo de siervos". Éstas son algunas de las frases que se pueden leer en el artículo publicado por El Pueblo Chino.
"El Budismo Tibetano es un arma política con la que espera dividir a la madre patria", prosigue, y acusa a "la camarilla del Dalai Lama de difundir el falso rumor" de que China mantiene oprimido al Tíbet.
Por su parte el "Diario del Tíbet", la versión local del medio portavoz, ridiculiza al Dalai Lama, de 73 años, catalogando de "hipócrita" su actitud "misericordiosa, amable y no violenta".
Estos ataques contra el Dalai Lama se producen un día después de que un funcionario chino anunciase la disposición del régimen a reunirse con un emisario del líder espiritual. Lo que parece más un gesto estético dirigido a satisfacer las presiones de la comunidad internacional que le pedían movimientos que un intento real de entendimiento con el Dalai Lama.
Coincidiendo con los preparativos de la gira olímpica, los tibetanos emprendieron una serie de revueltas que se extendieron a otras regiones y que la dictadura reprimió con el uso de la fuerza bruta.
La celebración de los Juegos Olímpicos en Pekín ha hecho que se pusiera el foco en el estado de las libertades y de los derechos humanos en el gigante asiático. Las protestas contra la violación de estos derechos fundamentales se han extendido en todo el planeta teniendo especial repercusión en aquellas ciudades por las que ha paseado la antorcha olímpica.