LD (EFE) El servicio de autobús que comunica las ciudades de Muzaffarabad y Srinagar, capitales de las zonas paquistaní e india de Cachemira respectivamente, se reanudó este jueves tras 58 años, pese al boicot de los grupos terroristas de corte separatista de la parte india que han perpetrado ataques en la ruta y contra los pasajeros en los últimos días.
Durante el trayecto, un artefacto de fabricación casera hizo explosión a unos 27 kilómetros de Srinagar, pocos minutos después del paso del autocar, y causó heridas a tres civiles y un agente de la Policía. Pese al incidente, los 19 pasajeros del autobús llegaron a salvo al paso de Kaman, donde fueron recibidos con bandas de música y guirnaldas de flores por dirigentes políticos y cientos de personas que celebraban este paso histórico en la mejora de las relaciones entre la India y Pakistán.
La autoría del último atentado fue reclamada por los mismos grupos terroristas que este miércoles atacaron el hotel de Srinagar desde el que estaba previsto que partiese el autobús y donde se suponía que estaban hospedados los viajeros, que habían recibido amenazas de muerte. Dos terroristas resultaron muertos y varias personas más heridas en el ataque, mientras que el edificio ardió en llamas y quedó destruido.