LD (EFE) El virtual presidente electo de Nicaragua, Daniel Ortega, ganador de las elecciones del pasado domingo, se ha proclamado vencedor de las elecciones celebradas el domingo pasado después que el Consejo Supremo Electoral informara que con el 91,48 por ciento de los centros de votación escrutados, el candidato del FSLN ha obtenido el 38,07 por ciento de los sufragios.
En un discurso, el sandinista se comprometió a mantener la "estabilidad", buscar la "reconciliación nacional" y trabajar para "sacar a Nicaragua de la pobreza". Ortega pronunció esas palabras acompañado por el segundo candidato más votado, Eduardo Montealegre, de la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), quien acudió a la sede del FSLN a felicitar a su líder.
Ortega ha logrado evitar una segunda vuelta gracias a una norma electoral que él mismo consiguió imponer en el año 2000 como parte de un pacto con el entonces presidente, el liberal Arnoldo Alemán, sentenciado a veinte años de prisión por corrupción. Esa ley establece que un candidato puede ganar en primera vuelta las elecciones con el cuarenta por ciento de los votos, o con el 35 por ciento y una ventaja de al menos cinco puntos sobre su inmediato rival político.
En su discurso triunfal, el sandinista destacó que la presencia de Montealegre y su esposa Elisa Mcgregor "es una señal de la muy clara voluntad que tenemos los nicaragüenses de trabajar por el bien del país y la estabilidad, y de que por encima de nuestras diferencias políticas pesa en primer lugar el compromiso que tenemos de sacar a Nicaragua de la pobreza".