LD (EFE) Plácido Micó, diputado y dirigente del partido Convergencia para la Democracia Social de Guinea Ecuatorial, denunció que al menos diez presos políticos que padecen diversas enfermedades, pueden morir en cualquier momento en la cárcel de Black Beach.
El diputado opositor afirmó que existe "una voluntad política de maltratarlos, tenerlos en unas condiciones inhumanas y buscar no solamente su sufrimiento, incluso situaciones que pueden llevar a la muerte de algunos de ellos". Explicó que "hay más de diez presos que se encuentran gravemente enfermos y a los que no se les permite ir al hospital".
Micó recordó que "antes les daban permiso para que los que estuvieran enfermos pudieran obtener la correspondiente autorización o baja para poder ir al hospital y ser vistos por un médico y desde hace más de tres semanas no se les permite".
El líder del principal partido de oposición en el Parlamento, mencionó que las autoridades carcelarias alegan que para acudir al médico los internos deben tener una autorización del juez, "pero ellos no pueden salir de la cárcel para ir a verse con el juez y los jueces tampoco van a Black Beach para interesarse por la situación de los presos". Lamentó que las autoridades carcelarias nieguen a los reclusos "tener contacto con la gente de fuera", lo que es una "flagrante violación de los derechos de las personas encarceladas que están bajo la responsabilidad del Gobierno".