(Libertad Digital) El diario Le Figaro publica este martes declaraciones del ministro francés Jean-Louis Borloo, uno de los portavoces del Gobierno para el caso del accidente. Para Borloo "estamos hoy ante un total desconocimiento de lo que ha ocurrido", al tiempo que ha aclarado que "la hipótesis terrorista no es por el momento una posible pista".
Por el momento, los equipos de rescate se han centrado en la zona –ya en aguas senegalesas– donde un piloto de la aerolínea brasileña TAM dice haber visto "extraños puntos naranjas" y "puntos luminosos". Para muchos, esto podría apuntar a partes del fuselaje del avión en llamas. La Fuerza Aérea de Brasil informó de que ha movilizado ocho aeronaves, que se suman a los tres navíos de la Marina que rastrean el área que corresponde al control aéreo brasileño, mientras que la zona bajo control aéreo de Dakar está siendo rastreada por aviones franceses.
Piden no especular sobre las causas
La Oficina de Investigación y Análisis (BEA, según sus siglas en francés) para la seguridad de la aviación civil recomendó evitar "cualquier interpretación prematura" y "especular" sobre las causas de la desaparición del avión basándose en informaciones "parciales y no confirmadas", según informa en un comunicado. La BEA ha creado un equipo de investigación para determinar las circunstancias del siniestro.
Por su parte, el director general de la aerolínea precisó que el aparato había emitido varios "mensajes automáticos de mantenimiento" en los que alertaba de "averías en numerosos componentes". Su jefe de comunicaciones, François Brousse, dijo que lo "más probable" es que "fuese fulminado por un rayo".