L D (Agencias) Barack Obama es el primer afroamericano con una oportunidad real de ganar no sólo la candidatura presidencial del Partido Demócrata, sino también las elecciones del próximo año. Sin embargo, tendrá en frente a Hillary Clinton, esposa del ex presidente que tuvo en la comunidad negra uno de sus máximos apoyos para ganar las elecciones de 1992 y 1996.
Obama habló en la iglesia "Brown Chapel" y, en la misma calle, en la "First Baptist Church" estaba Clinton. Los dos fueron a Selma para conmemorar el llamado "Domingo Sangriento", que tuvo lugar el 7 de marzo de 1965 cuando la Policía de Alabama cargó contra unas 600 personas que participaban en una marcha a favor de los derechos civiles en el puente Edmund Pettus.
"Estoy aquí porque alguien marchó por nuestra libertad", afirmó Obama. "Estoy aquí porque todos vosotros os sacrificasteis por mi. Estoy en pie sobre los hombros de gigantes", dijo el senador demócrata por Illinois ante centenares de personas. Por su parte, Clinton dijo que "tras el duro trabajo de deshacernos de las pruebas de alfabetización y el impuesto de capitación, debemos permanecer despiertos porque tenemos que marchar para seguir adelante", y se agregó: "¿Cómo podemos descansar mientras la pobreza y la desigualdad siguen creciendo? Todos sabemos que tenemos que terminar la marcha, esa es la misión de nuestra generación".
Otros candidatos demócratas también rindieron tributo a los hechos de Selma. John Edwards hablaba sobre ello en la Universidad de California, en Berkeley. "La lucha por los derechos civiles y por la justicia social y económica es algo más que asistir a celebraciones, inclusive algunas tan maravillosas como las de Selma", dijo Edwards. En declaraciones preparadas, al aludir a la lucha de los conserjes de Berkeley por un aumento de sueldos. "La lucha se libra aquí, y se libra ahora", añadió. Edwards no aceptó una invitación para hablar en Selma y dejó que esa ciudad de unos 20.000 habitantes quedase como escenario de la pugna entre los dos favoritos.
Hillary Clinton, que aspira a ser la primera presidente mujer, también habló en la iglesia de Selma y trajo consigo un arma secreta: su esposo. Tres días antes del aniversario, su campaña anunció que el ex presidente, de enorme prestigio entre la comunidad negra, la acompañaría e ingresaría en el Salón de la Fama del Derecho al Voto. Bill Clinton, en su discurso de ingreso al salón dijo que en la campaña del 2008 "una coalición arco iris se postula a la presidencia". "Si no fuera por la ley del derecho al voto, el sur no se hubiera recuperado y dos sureños blancos, Jimmy Carter y Bill Clinton, no hubieran sido presidentes", dijo. Aparte de las referencias personales, el contenido de los discursos de los dos candidatos fue similar. Ambos denunciaron las desigualdades en educación y salud, así como el "abandono" de los damnificados del huracán "Katrina", que en su mayoría son negros.
Por ahora, se desconoce el resultado del duelo entre los dos políticos, pero Obama es el hombre en alza entre los negros, un electorado clave para los demócratas porque vota de forma mayoritaria por ese partido. En enero, una encuesta del diario The Washington Post indicaba que un 60 por ciento de los miembros de esa minoría apoyaba a Clinton, frente a un 20 por ciento para Obama. En su último sondeo es Obama quien va en cabeza, con un 44 por ciento, comparado con el 33 por ciento de Clinton.