L D (Agencias) "Mi propuesta de tren de alta velocidad llevará a innovaciones que cambiarán el modo en que viajamos en América", afirmó Barack Obama, que subrayó la necesidad de este proyecto ya que "creará puestos de trabajo y ayudará a reducir la dependencia del petróleo en el sistema de transportes de Estados Unidos".
El presidente americano citó así el ejemplo de España, donde "un tren de alta velocidad entre Madrid y Sevilla ha tenido tanto éxito que hay más gente que viaja entre ambas ciudades por ferrocarril que en coches y aviones juntos", o Francia, donde "ha sacado a las regiones del aislamiento, transformando ciudades poco activas en prósperos destinos turísticos".
En concreto, el plan contará con unos 8.000 millones de dólares. Además, Washington destinará otros 1.000 millones de dólares (unos 758 millones de euros) anuales durante los próximos cinco años.
El proyecto prevé una red de corto y largo recorrido con trenes que viajen hasta los 240 kilómetros por hora. En Estados Unidos apenas cinco líneas superan actualmente los 127 km/h.
La Casa Blanca compara este proyecto con la creación en los años 50 bajo la presidencia de Dwight Eisenhower de un sistema nacional de autopistas que revolucionó el transporte por carreteras en Estados Unidos.