L D (Agencias) La nueva etapa a la que se refiere el estadounidense es una respuesta a las declaraciones de Raúl Castro, quien el viernes dijo que estaría dispuesto a establecer un diálogo abierto con Washington, pero siempre y cuando se haga "en igualdad de condiciones".
"Cada una de nuestras naciones tiene el derecho de seguir su propio camino, pero todos tenemos la responsabilidad de conseguir nuestros propios sueños como sociedades democráticas (...) y de cara a ese final, Estados Unidos está buscando un nuevo comienzo con Cuba", dijo Obama en la ceremonia de inauguración de la V Cumbre de las Américas que comenzó ayer en Puerto España.
El mandatario norteamericano llegó a Trinidad y Tobago el viernes por la tarde para participar en esta reunión, considerada como un encuentro clave entre las potencias iberoamericanas, y en el que Cuba se ha convertido en principal protagonista a pesar de su destacada ausencia, según informa la cadena CNN en su edición digital.
El inquilino de la Casa Blanca reconoció que las relaciones entre ambos países han estado marcadas por "décadas de desconfianza", aunque dijo que era momento de poner fin a esa situación y de pasar página y, en ese sentido, recordó que Washington ya levantó a comienzos de semana las restricciones de viajes a la isla, pero eso parece ser sólo el principio.
"Estoy preparado para que mi administración comience a trabajar con el Gobierno cubano sobre muchas cuestiones, desde Derechos Humanos, hasta las reformas en materia económica, de migración, o del tráfico de drogas", precisó el demócrata durante su discurso que fue seguido con gran expectación por los mandatarios iberoamericanos presentes en la reunión.
"Dejadme ser claro: no estoy interesado en hablar por hablar, sino que realmente creo que podemos iniciar un nuevo rumbo en las relaciones entre ambos países", detalló Obama, en unos comentarios que representan un sustancial cambio en la política norteamericana seguida por el anterior presidente George W. Bush.
"Las venas abiertas de América Latina"
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha regalado a su homólogo estadounidense, Barack Obama, el libro "Las venas abiertas de América Latina", considerado de culto por la izquierda del continente y escrito por el uruguayo Eduardo Galeano.
Cuando Obama ya estaba sentado junto a los líderes de UNASUR para celebrar su reunión, el presidente de Venezuela aguardó a que el estadounidense acabara de hablar para levantarse de su silla y dirigirse a él, antes de hacerle entrega del libro.
El gesto tuvo lugar al inicio de la reunión entre Obama y los líderes de Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), que se celebró antes de iniciarse la primera sesión plenaria de la V Cumbre de las Américas, en el estado caribeño de Trinidad y Tobago.
El último detalle de Chávez ocurrió después de que en la víspera ofreciera a Obama su amistad y le diera un apretón de manos, durante la inauguración de la cumbre. "Con esta misma mano hace ocho años yo saludé a (George W.) Bush Bush. Quiero ser tu amigo", le dijo Chávez el viernes, al estrechar la mano con el nuevo gobernante de Estados Unidos. Tras recibir el ejemplar, Obama le agradeció, lo mostró ante las cámaras y lo dejó sobre la mesa.
Galeano, quien escribió "Las venas abiertas de América Latina" en los años 70 del siglo pasado, se ha convertido en un exponente clave de la izquierda del continente y un recurrente asistente a foros alternativos, y además tiene amistad con algunos gobernantes de Latinoamérica.
Este libro, que relata la historia de América en forma cronológica y a través de relatos cortos, da cuenta de los abusos que cometieron los colonizadores europeos contra los pueblos originarios y del saqueo al que fueron sometidos los territorios que hoy conforman Latinoamérica y el Caribe.
Fuentes de la Casa Blanca calificaron el libro que recibió Obama como una obra académica que representa "la base de la teoría de la dependencia de América Latina" con el vecino del norte.