LD (EFE) Dos proyectiles fueron lanzados la noche de este lunes contra la base española de Herat (Afganistán). Uno de los morteros impactó a doscientos metros de la valla exterior, sin que se registraran daños personales ni materiales en el contingente español. De los primeros análisis del incidente se deduce que puede tratarse de proyectiles de mortero o de artillería de un calibre cercano a los cien milímetros.
Un portavoz del Ministerio de Defensa explicó que sobre las 23.23 y las 23.25, hora local, los militares españoles escucharon dos explosiones. Tras decretarse la alerta, un equipo de desactivación de explosivos comprobó que un proyectil había impactado a doscientos metros de la valla norte de la base y a 1.300 metros de los hangares de mantenimiento. El otro, según los cálculos, hizo lo propio a tres kilómetros.
En tanto, un comunicado del mando de las fuerzas estadounidenses desplegadas en Afganistán informa de que al menos diez terroristas talibanes murieron en el norte de la provincia meridional afgana de Helmand, justo en el Valle de Sangin. Los violentos combates tuvieron lugar después de que soldados de la coalición localizaron a un "subcomandante regional" con "lazos directos" con el líder talibán Mulá Dadulá.
Tras detectar su presencia, los terroristas abrieron fuego con armas ligeras y lanzagranadas contra las ropas militares, que respondieron al ataque y mataron a una decena de talibanes, al tiempo que capturaron a dos de ellos. Además, las fuerzas afganas y de la Coalición descubrieron un arsenal de armas ligera en las inmediaciones de las instalaciones, que fueron destruidas en ese mismo lugar.