Once personas han resultado heridas en una explosión por combustión de hidrógeno ocurrida en la planta de nuclear de Fukushima (noreste de Japón), que no ha causado daños en el reactor, informó la empresa operadora de la central.
Entre los heridos hay al menos un militar de las Fuerzas de Auto Defensa (Ejército) de Japón, con fracturas de varios huesos, mientras otros sufren heridas leves, según los datos difundidos por la agencia local Kyodo.
El estallido se produjo en el recipiente secundario de contención del reactor número 3 en la planta 1 (Daiichi) de Fukushima, situada a unos 270 kilómetros de Tokio. El ministro portavoz, Yukio Edano, aseguró que el recipiente primario del reactor está intacto y que a las 11.36 hora local (02.36 GMT), una media hora después de la explosión, el nivel de radiactividad a cinco kilómetros del lugar era similar a la de ayer, por lo que descartó "una fuga masiva".
Pese a que se había ordenado evacuar un radio de veinte kilómetros en torno a la central, unas 500 personas que todavía permanecían en ese perímetro en el momento de la explosión están siendo trasladadas a otros lugares, añadió Edano.
La Agencia de Seguridad Nuclear nipona había hecho poco antes un llamamiento para que esos residentes permanecieran en sus casas, cerrasen las ventanas y apagasen los sistemas de ventilación con el fin de evitar una eventual contaminación.
La explosión se produjo dos días después de la ocurrida en el edificio del reactor número 1 de esa misma central, que con 40 años es la más antigua de la zona, y que causó heridas leves a tres empleados, según TEPCO.
Poco antes de que se produjera la segunda explosión, el primer ministro japonés, Naoto Kan, señaló que la situación en la planta de Fukushima era todavía "alarmante".