LD (EFE) En una ceremonia celebrada en Bürgenstockm, Suiza, para poner fin a las negociaciones sobre Chipre, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, anunció que someterá a referéndum su plan para la reunificación de la isla mediterránea.
Ante los mandatarios de Grecia y Turquía, así como los gobernantes de ambas partes en que está divida la isla, Annan subrayó que "será la voluntad del pueblo la que cuente. Tenemos que ser claros, dijo el Secretario General. La alternativa no es entre este plan y alguna otra solución mágica, sino entre este arreglo o ninguno".
Poco antes, los negociadores grecochipriotas habían calificado de "insatisfactorios" los cambios de última hora propuestos por Annan, asesorado por su enviado especial para Chipre, Álvaro de Soto, porque no tuvieron en cuenta los cambios "sugeridos" por su Gobierno, según su portavoz, Kypros Chrysostomidis. Frente al rechazo abrumadoramente mayoritario que el plan provoca entre los grecochipriotas, según los últimos sondeos, la comunidad turca parece más entusiasta ya que de aprobarse, pondría fin a treinta años de aislamiento y de embargo económico de la llamada República del Norte de Chipre, no reconocida internacionalmente.
Annan recordó a los dirigentes reunidos aquí que su responsabilidad es informar a sus pueblos sobre el plan al que tendrán que decir sí o no de forma que "cada votante pueda hacerse su propia opinión". El Secretario General señaló que, si se aprueba el plan, Chipre se reunificará a tiempo para entrar en la Unión Europea el próximo primero de mayo, y agregó que después de algún tiempo habrá libertad de movimiento en toda la isla.