LD (EFE) Las lluvias torrenciales de la semana pasada en Corea del Norte causaron trescientos mil desplazados y supondrán la pérdida de 450.000 toneladas de grano, el 11 por ciento de la producción del país, según un informe de Naciones Unidas.
Los cálculos difundidos por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU, tras entrevistar a varios funcionarios de la dictadura comunista norcoreana, alertan que más de trescientos mil norcoreanos han tenido que abandonar sus hogares destruidos por las lluvias torrenciales o las inundaciones posteriores.
En una entrevista, el portavoz del PMA, Paul Risley, resaltó la necesidad de que la comunidad internacional estudie el envío de ayuda humanitaria a largo plazo al país comunista, y añadió que en la actualidad se está estudiando con las autoridades de Pyongyang cómo entregar la ayuda urgente a los damnificados.
El pasado martes, el régimen comunista de Corea del Norte tuvo que reconocer que las fuertes precipitaciones que cayeron desde entre el 7 y el 12 de agosto en el país habían causado cientos de muertos y desaparecidos, además de cuantiosos daños materiales. Por su parte, el Gobierno de Seúl ha iniciado el procedimiento para enviar ayuda humanitaria a la población norcoreana.