LD (EFE) Vecinos de la aldea de Tak Bai, en la provincia de Narathiwat, encontraron este martes la cabeza de Jaran Torae, de 58 años, el alcalde de la localidad, en una carretera cercana junto a una nota en la que se leía "esto es una venganza por la masacre de los jóvenes inocentes musulmanes".
El cuerpo fue posteriormente hallado en una plantación de caucho ubicada a un kilómetro del lugar donde se descubrió la cabeza, indicó la policía local, que añadió que los agresores decapitaron a la víctima tras dispararle mortalmente.
Tak Bai fue el escenario el lunes pasado de una manifestación protagonizada por unos tres mil musulmanes que acabó con la muerte por asfixia de 78 personas cuando eran conducidas en un camión a las dependencias policiales de Narathiwat. Otros seis manifestantes murieron en el curso de la manifestación, que fue dispersada por la policía con gases lacrimógenos y fuego real.