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Muere un artificiero al intentar desactivar una bomba colocada en un restaurante del centro de Moscú

Un artificiero de los servicios de seguridad rusos murió este jueves al intentar desactivar una bomba en un restaurante del centro de Moscú. Los dueños del local alertaron a la Policía sobre la presencia de una mujer con aspecto sospechoso. Tras un registro fue descubierta en el interior de su bolso una potente bomba. El artefacto estalló justo cuando los expertos intentaban desactivarlo.

LD (EFE) Un artificiero del Servicio Federal de Seguridad (FSB) ruso murió en la madrugada del jueves al estallarle el potente artefacto explosivo que intentaba desactivar, informaron autoridades de Moscú. La explosión ocurrió junto al restaurante “Imbir”, en la céntrica calle Tverskaya-Yamskaya, que fue cortada al tráfico tras el estallido.

Agentes de la Policía habían llegado al local al ser alertados por los guardias de seguridad sobre una mujer “con aspecto caucásico”, de la que sospechaban. Al llegar los policías, la mujer indicó que en su bolso había una potente bomba y que estaba dispuesta a hacerla estallar dentro del local. Los agentes de seguridad arrojaron el bolso a la calle y llamaron a un equipo del FSB, que trató de desactivar el artefacto. Sin embargo, la bomba estalló cuando era manipulada por uno de los artificieros, que falleció instantáneamente.

La Fiscalía de Moscú sospecha que la detenida está relacionada con las dos terroristas suicidas que se inmolaron el pasado sábado en un concierto de rock, causando 14 muertos y cincuenta heridos. Las informaciones preliminares informan que la detenida el jueves podría ser la tercera mujer implicada en el atentado contra el aeródromo de Tushino.

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