LD (EFE) Los ciudadanos de Montenegro decidirán en el referéndum del próximo domingo si desean que su pequeña república proclame la independencia del Estado común con Serbia y restablezca así el estatus que tuvo hasta 1918.
Para la validez de la consulta es necesaria una participación superior al 50 por ciento y se considerará que la independencia es respaldada si esa opción obtiene el 55 por ciento de los sufragios, conforme a la fórmula propuesta por la Unión Europea (UE), que fue recogida en la nueva ley sobre el referéndum.
De hecho, los montenegrinos se pronunciarán definitivamente en este plebiscito sobre el proyecto independentista que su primer ministro, Milo Djukanovic, lanzó hace nueve años tras romper con su mentor, el entonces líder serbio, Slobodan Milosevic. Los ciudadanos de Montenegro están desde esas fechas profundamente divididos y, según los últimos sondeos, un 49 por ciento está a favor de la independencia mientras en torno al 40 por ciento está en contra.
El cuatro de febrero de 2003, la RFY fue transformada en la actual unión estatal de Serbia y Montenegro, conforme al acuerdo que las autoridades independentistas montenegrinas y las federalistas serbias lograron bajo la mediación del alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Javier Solana. Djukanovic y sus seguidores destacan que la actual unión estatal no es funcional y que Montenegro (de 670.000 habitantes) y Serbia (de 7,5 millones) podrán alcanzar la igualdad sólo si son dos Estados independientes e internacionalmente reconocidos.