(Libertad Digital) Ofer Regev, hermano mayor del joven Eldad Regev, asesinado por Hezbolá, y cuyo cadáver fue devuelto ayer miércoles a su familia tras dos años de prolongada angustia, ha empezado su discurso -según relata la edición on line de The Jerusalem Post- con con una canción del rockero israelí Shalom Hanoch: "Un hombre extraño, tu enemigo, igual que tú/ Tu sabes que él no quiere morir, igual que tú".
A propósito de esta canción Ofer Regev ha continuado diciendo que "nosotros vivimos en un mundo en el que creemos que nuestro enemigo es igual que nosotros". "Nosotros pensamos que podemos hablar con la gente que también quiere criar a un niño, plantar una flor, amar a una mujer, igual que nosotros. Pero es evidente que el enemigo (Hezbolá) no es como nosotros. Aún así, no pararemos de intentarlo".
"Hoy sigo triste, llorando; pero orgulloso. Orgulloso de mi país que ha luchado conmigo para traerte de vuelta, orgulloso de cada ciudadano que ha pensado en tí, Eldad, como un hermano. Estoy orgulloso de pertenecer a aquellos que aman y no aquellos que odian. Y de toda la nación que ha pagado un alto precio a su pesar; ellos saben que la camaradería no tiene precio", siguió Ofer ante la atenta mirada de miles de personas.
Parafraseó, además, una frase del fundador del Estado de Israel, David Ben Gurion: "Todas las madres hebreas deben saber que el destino de sus hijos, incluso si ellos son secuestrados, reside en las manos de los comandantes que no descansarán y nunca los abandonarán hasta que no estén de regreso".
"Estoy orgulloso de mi hermano pequeño, un hombre con muchos talentos, un amante de la literatura y el fútbol. Un verdadero patriota en la primera línea de fuego, pero, también en su vida diaria", ha subrayado.
Los multitudinarios sepelios de los restos de los soldados israelíes Ehud Goldwaser y Eldad Regev han sido transmitidos por casi todos los medios de comunicación. Las imágenes mostraban a miles de personas que se agolparon en las calles para arropar a los familiares de los jóvenes militares.
Los restos del soldado israelí Ehud Goldwaser han sido enterrados a primera hora de la mañana de este jueves en una emotiva ceremonia que tuvo lugar en el cementerio militar de la ciudad de Naharia, en el norte de Israel. La joven viuda, Karnit, que contrajo matrimonio con él ocho meses antes de su muerte, aseguró entre sollozos: "Ehud continuará siempre siendo mi voz interna, mi socio mientras yo continúo con mi vida".
En el sepelio, difundido por los medios de comunicación israelíes y seguido por miles de personas, la madre de Goldwasser, Miki, se dirigió a los asistentes: "No voy a llorar. No ahora. Me presento ante vosotros con mis ojos alzados y una petición: que os mantengáis en pie y levantéis vuestras cabezas con orgullo nacional".
En ella estuvo presente el ministro de Defensa, Ehud Barak, que aseguró que "si alguno de vosotros, Dios no lo quiera, fuese capturado o le ocurriera algo peor, el Estado de Israel y su Gobierno harán todo lo que sea justo y necesario". "Israel trabajará para traer a sus soldados, vivos, heridos o muertos", indicó. Y añadió: "el viaje de dolor ha terminado, pero el interminable viaje de la memoria y el luto está empezando".