LD (Agencias) La Fiscalía marroquí ha reclamado la aplicación de “penas ejemplares” para Mohamed el Omari (vigilante nocturno de 23 años), Rachid Jalil (soldador de 27 años) y Yasin Lahnech (vendedor ambulante de 22), acusados de “homicidio voluntario con premeditación, sabotaje, atentado contra la seguridad del Estado y constitución de una asociación criminal”. Los tres son considerados terroristas suicidas supervivientes de los atentados en Casablanca.
Según informa la agencia de noticias Europapress , el fiscal marroquí señaló el “flagrante delito” y estableció que Omari y Jalil fueron “arrestados en el lugar del crimen y heridos durante las explosiones del 16 de mayo”. El tercer suicida, Yasin Lahnech, es uno de los “emires” del movimiento integrista Salafia Yihadia, encargado del adoctrinamiento de los nuevos reclutas. Los tres pueden ser condenados a la pena de muerte tras la promulgación en junio de la ley antiterrorista.
Los acusados han comparecido este lunes junto a otros 49 miembros de la Salafia Yihadia, implicados en “diferentes grados” en los atentados del 16 de mayo. En su discurso, el fiscal ha señalado que los tres terroristas “han alterado el mensaje del Islam y le han dado un severo golpe”. Finalmente, calificó los ataques de “obra satánica” que debe ser castigada con “penas extremas y ejemplares” en “nombre de todos los marroquíes, las víctimas y sus familiares. Un total de 44 personas, entre ellos doce suicidas, murieron en los atentados del 16 de mayo perpetrados contra el hotel Farah, restaurantes del centro de la ciudad, la “Casa de España” y varios establecimientos judíos.
Según informa la agencia de noticias Europapress , el fiscal marroquí señaló el “flagrante delito” y estableció que Omari y Jalil fueron “arrestados en el lugar del crimen y heridos durante las explosiones del 16 de mayo”. El tercer suicida, Yasin Lahnech, es uno de los “emires” del movimiento integrista Salafia Yihadia, encargado del adoctrinamiento de los nuevos reclutas. Los tres pueden ser condenados a la pena de muerte tras la promulgación en junio de la ley antiterrorista.
Los acusados han comparecido este lunes junto a otros 49 miembros de la Salafia Yihadia, implicados en “diferentes grados” en los atentados del 16 de mayo. En su discurso, el fiscal ha señalado que los tres terroristas “han alterado el mensaje del Islam y le han dado un severo golpe”. Finalmente, calificó los ataques de “obra satánica” que debe ser castigada con “penas extremas y ejemplares” en “nombre de todos los marroquíes, las víctimas y sus familiares. Un total de 44 personas, entre ellos doce suicidas, murieron en los atentados del 16 de mayo perpetrados contra el hotel Farah, restaurantes del centro de la ciudad, la “Casa de España” y varios establecimientos judíos.