L D (EFE) El retorno del diplomático marroquí se produce cinco días después de la visita que el pasado jueves, hizo a Rabat el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, quien entregó a su colega, Taib Fassi Fihri, una carta del presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, para el rey Mohamed VI.
Según un comunicado distribuido por la agencia oficial marroquí, MAP, "después de la visita realizada a Marruecos el jueves, 3 de enero, por el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, se ha decidido hoy el regreso inmediato a su puesto del embajador de Su Majestad el Rey (Mohamed VI) a Madrid".
Moratinos y Fassi Fihri manifestaron la semana pasada la voluntad de sus respectivos Gobiernos de devolver la normalidad a sus relaciones después de la crisis que hace dos meses las enturbió cuando los Reyes de España visitaron Ceuta y Melilla. Moratinos viajó a la capital marroquí y entregó a su homólogo la carta del presidente del Gobierno español.
El Gobierno sólo informó de que en la carta Rodríguez Zapatero expresaba su deseo de que se mantengan e, incluso, "se mejoren las buenas relaciones" existentes entre los dos países. Además ensalzaba las relaciones de los dos Gobiernos y se hizo llegar al monarca marroquí un mensaje de amistad, con un balance de las relaciones bilaterales en materias como la inmigración, la pesca, la política antiterrorista, la economía o las inversiones. También se manifestaba en la carta el interés de Madrid en que "pronto" pueda convocarse la reunión de alto nivel bilateral que mantienen anualmente los dos países en virtud del tratado de amistad que tienen suscrito. Sin embargo se desconocen los términos concretos de la misiva que hayan podido provocar este cambio radical en la postura de Marruecos, sin que aparentemente nada haya cambiado en torno a Ceuta y Melilla.
El embajador Azziman fue llamado a consultas el 2 de noviembre por orden del rey Mohamed VI como símbolo de la irritación que provocó la primera visita oficial de los Reyes españoles a las ciudades españolas del norte de Africa cuya soberanía reclama Rabat.
Esa visita –los días 5 y 6 de noviembre– fue rechazada inmediatamente por el Gobierno marroquí, una coalición de partidos encabezada por el primer ministro Abás el Fassi, líder del nacionalista Partido Istiqlal, que pretende anexionar a Marruecos las dos ciudades españolas. La semana pasada tanto Moratinos como Fassi Fihri declararon que trataron en su reunión el asunto de Ceuta y Melilla, pero el ministro español aseguró que en este tema "hay posiciones divergentes y son conocidas".