(Libertad Digital) El eurodiputado Luis Herrero, integrante de la misión de observadores de la Unión Europea, afirmó en "La mañana" de la COPE que durante unas cuatro horas el régimen de Hugo Chávez pretendió sembrar la incertidumbre entre los venezolanos al guardar silencio sobre los resultados del referéndum. Explicó que Chávez conocía las tendencia en punto de las nueve de la noche, hora local, pero los datos empezaron a ser difundidos hasta la una de la madrugada. En ese lapso, destacó, el presidente y su equipo estuvieron planeando cómo "manejar estratégicamente" el "golpe tremendo" que le ha dado el electorado.
Herrero señaló que aunque la ley electoral venezolana prohíbe la difusión de encuestas de salida de urnas o datos con las tendencias, los principales partidos opositores, los grupos de estudiantes y otras organizaciones de disidentes ya conocían los resultados. Pero, insistió, el régimen utilizó esas cuatro horas de margen para negociar el porcentaje de votación para el "No" que podría reconocer. "Definitivamente –aseguró–, Chávez no estaba dispuesto a aceptar una derrota holgada del `Si´". Incluso, afirmó que es muy posible que se negociara un acuerdo político.
Respecto a los resultados, dijo que para explicarlos hay que tener en cuenta que los partidos políticos tradicionales en Venezuela están "completamente pulverizados". Ese espacio, comentó, ha sido ocupado por los grupos de estudiantes opositores que han salido a la calles a protestar contra el régimen. El segundo punto, mencionó, ha sido la actuación del general retirado y ex ministro de Defensa de Chávez, Raúl Baduel, quien, desde el "chavismo", se ha convertido en un referente de muchos oficialistas.
Finalmente, destacó el eurodiputado, la victoria del "No" también es una consecuencia del papel que ha asumido la Iglesia católica que calificó la reforma constitucional impulsada por Chávez de "moralmente inaceptable".
Comienza el declive
En Madrid, el portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, ha considerado "un motivo de tremenda satisfacción para cualquier demócrata" que Chávez "haya tenido un revés y una derrota tan rotunda". En su opinión, dijo, tras la celebración del referéndum comienza "una etapa de declive" para el régimen venezolano.
Zaplana ha hecho hincapié en que Chávez "se ha llevado el primer revolcón importante" desde que gobierna el país, y ha remarcado que con la victoria del "no" ha quedado demostrado que sus "bravuconadas ya no impresionan, ni siquiera a sus ciudadanos, que son los que de forma más dura y directa le sufren". Apuntó que, al margen de cómo le haya sentado al Gobierno de España el resultado de la consulta, "para los intereses de España es una buena noticia".
Ha recordado Zaplana que durante esta legislatura el Gobierno socialista ha mantenido "buenas" relaciones con Venezuela mientras las empresas españolas han sido "coaccionadas permanentemente" y "perjudicadas", de manera que lo ocurrido tendrá consecuencias "necesariamente buenas" para estos intereses. Subrayó que los venezolanos han "tenido el coraje y el valor democrático suficiente" para oponerse a Chávez en las urnas. A partir de ahora, auguró, "empieza una etapa de declive, claramente, de un personaje al que se temía y se le tendrá miedo y temor".