LD (EFE) El Partido Socialista adelantó a la UMP en la primera ronda de las elecciones municipales celebradas este domingo en Francia, al obtener un 47 por ciento de los votos, pero la derecha resistió mejor de lo esperado con un 45 por ciento, lo que deja abierta la segunda vuelta para fijar el control de muchos ayuntamientos.
Esos eran los porcentajes ofrecidos esta madrugada por el Ministerio del Interior sobre la base de veintiséis millones de inscritos en unos comicios que tuvieron una participación relativamente baja, del 61 por ciento, frente al 67,29 por ciento en la misma primera vuelta de las municipales de 2001.
Respecto a las elecciones cantonales, que también se celebraban en alrededor de la mitad de las circunscripciones del país para renovar a los representantes en los consejos generales de los departamentos, la ventaja de la izquierda fue más clara: un 48 por ciento frente al 41 por ciento.
El líder del Partido Socialista, François Hollande, destacó que esta primera vuelta "marca la voluntad de advertir al presidente de la República y al Gobierno", pero al mismo tiempo lanzó un mensaje a sus electores de cara a la segunda y última vuelta el próximo domingo: "una desmovilización (...) sería un grave error".