L D (Agencias) Francia ha desplegado un gran número de efectivos de seguridad para garantizar la seguridad de los jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza, que este sábado cruzarán desde Kehl a Estrasburgo para mantener la segunda jornada de trabajo de la Cumbre del 60 aniversario de la Alianza. Ayer las fuerzas del orden detuvieron a unos cien manifestantes en una primera jornada de violencia.
Según informan los medios locales, el ambiente se ha visto marcado nuevamente por las barricadas, los gases lacrimógenos y un alto grado de tensión en esta zona 'autogestionada' donde acampan los militantes de extrema izquierda.
Tras las barricadas levantadas con materiales recogidos de las obras, los manifestantes, un grupo de entre 200 y 300 vestidos de negro, encapuchados y levantando los puños, se han encarado a un centenar de gendarmes, que usaron gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersarlos.
Esta tarde, el llamado 'desfile solidario contra el circo de seguridad', en el que los manifestantes disfrazados de payaso, desfilaron pacíficamente para protestar contra la fortaleza en la que se ha convertido Estrasburgo para garantizar la seguridad de los líderes que acuden a la cumbre, pero se volvió a ver bloqueado por las fuerzas del orden a la entrada del barrio de Neuhof.
La Policía francesa ha trasladado a comisarías a unos 300 manifestantes para tomarles declaración, 70 de los cuáles permanecen bajo custodia policial, informaron fuentes policiales, citadas por el diario 'Nouvel Observateur'. Otros 30 manifestantes, tras ser interrogados por la Policía, fueron puestos en libertad.
Asimismo, entre 500 y 800 personas se han manifestado en Baden Baden, donde los líderes de la Alianza cenan este viernes en la ciudad balneario. La canciller alemana, Angela Merkel, guiará mañana a los jefes de Estado y de Gobierno aliados, salvo al presidente francés, Nicolas Sarkozy, al cruzar el puente de La Pasarela que une las ciudades hermanas de Estrasburgo y Kehl. Sarkozy les esperará a mitad del puente y cruzarán juntos al otro extremo del Rín, un paseo que simboliza la unión de los aliados.
La ministra del Interior francesa, Michèle Alliot, calcula que de "entre los 30.000 a 40.000 manifestantes" que se esperan acudan mañana al lado francés del río Rin para protestar por la reunión de la OTAN, unos 2.000 "representan un peligro violento".
Unos 25.000 policías y fuerzas antidisturbios han sido desplegados en Estrasburgo, en Kehl y en Baden Baden. Los líderes aliados analizarán ya en Estrasburgo de manera muy especial la nueva estrategia del presidente estadounidense, Barack Obama, para Afganistán y Pakistán y tratarán de llegar a un acuerdo para cubrir los 4.000 soldados necesarios adicionales para apoyar la seguridad de los comicios presidenciales afganos del 20 de agosto.