L D (EFE) Ambos fueron detenidos el pasado viernes por la policía, que los vigilaba desde hace aproximadamente un año tras haber recibido información de un confidente con el que los dos jóvenes estaban en contacto.
Los sospechosos tenían intención de colocar una bomba en la estación de Herald Square, donde habían llevado a cabo varias labores de vigilancia, en las que dibujaron diagramas de los accesos, la última de ellas hace tan sólo una semana. Según el jefe de la policía, Raymond Kelly, todavía no habían conseguido los explosivos para llevar a cabo el atentado, ni habían fijado una fecha para el ataque, que no parece tener relación con la celebración de la Convención Nacional Republicana en Nueva York.
Según la investigación, los detenidos no tenían lazos con grupos terroristas organizados, incluida la red Al-Qaeda. La acusación presentada contra ambos por la fiscalía explica que en sus conversaciones habían expresado su deseo de causar daños económicos y problemas, aunque querían evitar víctimas.
Durante conversaciones con el confidente que fueron grabadas en el último mes, debaten sus planes de colocar bombas no sólo en el metro, sino también en el puente de Verrazano, según la acusación, que precisa que El Shafay había dibujado mapas del puente y comisarías de Staten Island, otro de los barrios que integran la ciudad de Nueva York. Otros objetivos estudiados, según Kelly, eran la estación de metro situada en la calle 59 y Lexington; otra en la calle 42 no especificada; una prisión de Staten Island, y tres comisarías de este municipio.
La investigación policial sobre los jóvenes, que han ingresado en prisión sin derecho a fianza, comenzó en septiembre de 2003 cuando un confidente entró en contacto con Siraj en la librería donde ambos trabajan y propiedad del tío del detenido. En mayo, el sospechoso habló de colocar explosivos en Nueva York para causar daños al personal militar y agentes policiales estadounidenses, según la acusación presentada el sábado contra ambos por los fiscales.
En junio y julio, Siraj supuestamente hablaron de colocar bombas en puentes para dañar la economía y mencionaron su deseo de participar en la “guerra santa”. El Shafay, quien se habría involucrado en el proyecto hace unas semanas, conversó con el confidente sobre su odio hacia los sionistas y su solidaridad con el pueblo palestino.
Los sospechosos tenían intención de colocar una bomba en la estación de Herald Square, donde habían llevado a cabo varias labores de vigilancia, en las que dibujaron diagramas de los accesos, la última de ellas hace tan sólo una semana. Según el jefe de la policía, Raymond Kelly, todavía no habían conseguido los explosivos para llevar a cabo el atentado, ni habían fijado una fecha para el ataque, que no parece tener relación con la celebración de la Convención Nacional Republicana en Nueva York.
Según la investigación, los detenidos no tenían lazos con grupos terroristas organizados, incluida la red Al-Qaeda. La acusación presentada contra ambos por la fiscalía explica que en sus conversaciones habían expresado su deseo de causar daños económicos y problemas, aunque querían evitar víctimas.
Durante conversaciones con el confidente que fueron grabadas en el último mes, debaten sus planes de colocar bombas no sólo en el metro, sino también en el puente de Verrazano, según la acusación, que precisa que El Shafay había dibujado mapas del puente y comisarías de Staten Island, otro de los barrios que integran la ciudad de Nueva York. Otros objetivos estudiados, según Kelly, eran la estación de metro situada en la calle 59 y Lexington; otra en la calle 42 no especificada; una prisión de Staten Island, y tres comisarías de este municipio.
La investigación policial sobre los jóvenes, que han ingresado en prisión sin derecho a fianza, comenzó en septiembre de 2003 cuando un confidente entró en contacto con Siraj en la librería donde ambos trabajan y propiedad del tío del detenido. En mayo, el sospechoso habló de colocar explosivos en Nueva York para causar daños al personal militar y agentes policiales estadounidenses, según la acusación presentada el sábado contra ambos por los fiscales.
En junio y julio, Siraj supuestamente hablaron de colocar bombas en puentes para dañar la economía y mencionaron su deseo de participar en la “guerra santa”. El Shafay, quien se habría involucrado en el proyecto hace unas semanas, conversó con el confidente sobre su odio hacia los sionistas y su solidaridad con el pueblo palestino.